El juez Gansón vuelve a las andadas

Lo del Gansón no tiene nombre, su vanidad no conoce límites y su ego necesita ser constantemente alimentado, este juez con aires de grandeza o estrella del rock otra vez ha vuelto a hacerlo, necesita estar constantemente en los titulares de los periódicos para sentirse alguien, no le importa que hablen mal o bien de él, lo importante es que se hable de su persona día y noche, le encanta ser el protagonista de los casos mas polémicos o controvertidos, los que mas rápidamente lo pueden aupar hacia su querida posición de "juez estrella", término acuñado exclusivamente para él, puesto que gracias a Odín solamente existe un especímen de esta especie deleznable.

Ahora le ha dado por la burda farsa de wikileaks, parece que es este un buen caso de resonancia internacional acorde a sus espúreas ambiciones. Él es el primero que sabe perféctamente de que va el tema, él es más consciente que nadie de la farsa, pero no importa, wikileaks será el nuevo trampolín para el exdelfín del nefasto Felipe González, la justicia, la verdad y la defensa a los débiles son coartada perfecta para aparecer en los medios afines como el mesías de la justicia, a pesar de haber sido inhabilitado por sus propios compañeros, y por prevaricación, el mayor delito que pueda cometer un juez.

 

 

No puedo evitar la carcajada cuando veo a muchos que van de sociatas o "comunistas" y que siempre han despotricado de los jueces por ser los verdugos del sistema, ahora, guiados exclusivamente por la nueva biblia llamada Tv, defienden a quien es el mejor representante de lo que nunca debe ser un juez; la vanidad insana, la ambición desmesurada y el ego ilimitado no son precisamente las mejores cualidades que podríamos esperar de un juez, mas bien son la descripción de un político de partido, un banquero o un mafioso.

Su ambición política lo llevó hasta el PSOE, el gobierno sociata llegó a la conclusión de que había que buscarle algún carguito para tenerlo de su parte, era mejor así por lo que pudiera pasar con los GAL, el ambicioso cuervo no dudó, esta era su oportunidad de grandeza a manos de un PSOE que parecía perpetuarse en el poder a pesar de gobernar como fascistas y apoyar la guerra sucia o el terrorismo de estado, pero esto no le importaba ni lo mas mínimo al señor Gansón, sus principios tienen un rápido final y se pueden intercambiar como hacen los niños con los cromos de fútbol. En las elecciones de 1993 ocupó el segundo puesto en la lista del PSOE por Madrid. No era miembro del partido pero se sentía próximo a Felipe González, que le había prometido un puesto al frente de un nuevo organismo europeo de lucha contra el terrorismo y el crimen organizado.

Pocos meses después, al no ver compensadas sus aspiraciones políticas dejó su cargo de mando único de la Lucha contra la Droga y volvió a la judicatura, retomando el tema GAL. En ese momento, y no antes, utilizó todos sus conocimientos de político al otro lado del telón y metió en la cárcel a la cúpula entera de Interior del anterior gobierno socialista. Esta fue su particular venganza hacia un PSOE que no le había dado lo que quería, que conociendo su ambición de César no sería menos que la cartera de ministro de justicia, Garzón volvió a ser el héroe de la derecha a pesar de su actuación más que dudosa y de los probados acuerdos y chantajes a los policías Amedo y Domínguez, igual que cuando metió a medio País Vasco en el trullo porque según él todos los abertxales son terroristas.

Pero el viejo zorro González es bastante mas inteligente que él y lo utilizó como delfín, si no puedes contra tus enemigos únete a ellos, fue la política seguida por González con respecto a Gansón, una vez saliera de la política, cuando se percatara que Gonzalez sólo lo quería por interés, como el joven  que se casa con una vieja millonaria, cuando fuera consciente de su estupidez al pactar con el diablo sociata, ya sería demasiado tarde, ya estaría pringado hasta las cejas de la mierda sociata, tras salir del gobierno nacionalsocialista perdió la poca credibilidad que tenía, un juez con aspiraciones políticas y que se mete a político jamás debería volver a la judicatura, claro que esto es sólo aplicable a personas decentes y no a ambiciosos que lo único que les importa es su propia figura e interés enfermo.
 

Que bueno que estoy...

La ambición desmesurada es una enfermedad incurable y debido a ella se hacen muchos enemigos durante el camino hacia la meta final, tras ser amiguito de los sociatas, cuando vió que se habían reído de él, utilizó su puesto para vengarse de sus antiguos aliados que no le habían dado lo que ansiaba, poder político. Después, para no parecer demasiado facha se enfrentó a  la derecha tras investigar los crímenes cometidos por los franquistas de sobras por todos conocidos.


Este era un tema estrella para un juez estrella, sus intenciones no eran las de restaurar la dignidad de tantos españoles decentes asesinados vílmente por las ordas falangistas, este era el alimento perfecto para su ego inconmensurable, otra vez era el juez estrella con el caso estrella, pero esta vez se estrellaría de verdad contra el muro falangista que desgraciadamente sigue muy presente hoy día en la judicatura, prietas las filas. Esta era labor de un gobierno y los socialistas nunca tuvieron cojones ni ganas de hacer justicia a tantos inocentes asesinados por nada, solamente ha alguien tan pretencioso como Gansón se le ocurriría algo así, aunque era consciente de que no llegaría a nada, este caso lo volvería a colocar en el candelero y esta vez como justiciero del pueblo, igualico que César oigan, que prepotencia.

Esto último de defender al Hassan es buena prueba de la catadura moral hasta la que puede llegar a rebajarse el pretendido justiciero de los republicanos. Wikileaks no es mas que un monstruo de ciencia-ficción creado por los servicios secretos americanos para poder tener una excusa perfecta a la hora de recortar nuestros derechos y libertades en internet. No pueden controlar toda la red, siempre se les escapa algo y eso no pueden permitirlo quienes quieren controlarlo todo, gracias a la farsa de wikileaks se llevarán a cabo leyes que permitirán controlar todos los movimientos en la red - ya existe la tecnología para ello -, esto es poco menos que abrirles las puertas de las casas de todos los ciudadanos a la policía para que husmee cuanto le venga en gana sobre nuestras vidas. El tal Hassan es un pobre diablo que seguramente ha sido utilizado sin darse cuenta ni él mismo, Garzón no lo defenderá porque crea que es una causa justa, mas bien lo hará por la repercusión mundial que tiene el tema, si realmente quisiera hacer justicia podría empezar por meter en la cárcel a todos los que envenenaron a miles de personas con el aceite de colza y que se fueron de rositas, por poner un ejemplo cercano y real. Bueno, sólo me queda decir que suspendan a Gansón, pero de una cuerda atada a su cuello, salud y anarquía.