La tragedia de Chicago. Ricardo Mella



El movimiento obrero a favor de la reducción de la jornada de trabajo comenzó en América del Norte a principios del siglo. En los centros industriales de aquel extenso territorio, se agitó principalmente la clase trabajadora, siendo los constructores de edificios los primeros en iniciar el movimiento.

Ya en 1803 y 1806, se organizaron los carpinteros de ribera y los carpinteros de construcciones urbanas de Nueva York. Respectivamente, en 1832, se hizo en Boston la primera huelga en favor de las diez horas por los calafateadores y carpinteros, y aunque no tuvo resultados en aquella ciudad, la ganaron, en cambio los huelguistas de Nueva York y Filadelfia

El movimiento obrero adquirió gran incremento en 1840, a raíz de ser promulgada por el presidente de los Estados Unidos, Martín Van Buren, la jornada legal de las diez horas para todos los empleados del gobierno en las construcciones de la armada.

Día tras día fue haciéndose más consciente el movimiento obrero, y a la vez más revolucionario. no en vano luchaban los trabajadores y adquirían de la realidad experiencias dolorosas. Un mitin a favor de las diez horas tuvo lugar en Pittsburg, el 18 de junio de 1845, a consecuencia del cual se declararon en huelga más de 4.000 obreros que resistieron cinco semanas, a pesar de no contar con grandes recursos.

Desde 1845 a 1846, las huelgas se repitieron continuamente en los Estados de Nueva Inglaterra, Nueva York y Pensilvania. El primer congreso obrero se celebró en Nueva York el 12 de octubre de 1845, y en él se acordó la organización de una sociedad secreta para apoyar las reivindicaciones del proletariado americano. A medida que aumentaba la agitación en las filas de la clase trabajadora, germinaba en las esferas del poder la idea de hacer concesiones, y aunque éstas habían de resultar, como resultaron, perfectamente inútiles, no por eso dejaron de hacerse.

El Parlamento inglés estableció la jornada legal de diez horas en 1847, y en los Estados Unidos se celebraron innumerables mitines para felicitar a los obreros británicos por su triunfo. Felicitación vana, porque los grandes acaparadores ingleses no iban a conceder lo que el Estado les imponía. En el mismo año fue promulgada una ley de sentido idéntico en New Hampshire.

A consecuencia de un congreso industrial celebrado en Chicago en junio de 1850, se organizaron en muchas ciudades agrupaciones de oficio para obtener la jornada de diez horas por medio de la huelga. En 1853, en casi toda la república no se trabajaba más que once horas, mientras que antes no se trabajaba menos de catorce. Aunque lentamente, aquellos soberbios burgueses tuvieron que ir concediendo lo que los obreros pretendían. en algunos Estados llegó a promulgarse la legalidad de las diez horas. 

Desde entonces, los obreros norteamericanos consagraron todos sus esfuerzos a obtener la reducción de la jornada de trabajo a ocho horas solamente. El presidente Johnson promulgó la legalidad de las ocho horas para todos los empleados del gobierno, y los obreros continuaron reclamando a los patrones la adopción de este sistema.

El 20 de agosto de 1866 se celebró en Baltimore un gran congreso obrero, en el cual se declaró que ya era tiempo de que los trabajadores abandonasen los partidos burgueses, y se acordó, en consecuencia, organizar el Partido Nacional Obrero, el 19 de agosto del siguiente año celebraba su primer congreso en Chicago el nuevo partido.

En 1868 y en los siguientes años se declararon multitud de huelgas en pro de las ocho horas, perdiéndose la mayor parte de ellas, no por esto el movimiento cesó, sino que, como siempre, estas luchas animaron a los obreros a mayores empresas, inclinándolos cada vez más a las ideas socialistas. la liga de las ocho horas que se organizó en Boston el año 1869, adoptó decididamente el programa socialista, y en Filadelfia se organiza en el mismo año los Caballeros del Trabajo, asociación que entonces tenía grandes aspiraciones. Hoy se compone de complacientes servidores de la burguesía, por haberse entregado a hombres ambiciosos y sin honor.

De 1870 a 1871 empezaron a organizarse –entre los alemanes residentes en los Estados Unidos– las primeras fuerzas de la Asociación Internacional de los Trabajadores, la influencia que esta sociedad ejerció en el movimiento obrero americano fue notabilísima. Las masas populares, aún no bien penetradas de sus verdaderas aspiraciones, empezaron a comprender toda la grandeza de las ideas revolucionarias y pronto adoptaron otros temperamentos y otras tendencias. 

Puede decirse que los trabajadores americanos, como los europeos, deben sus más firmes ideas sociológicas a aquella gran asociación que, si en apariencia ha muerto, vive hoy más que nunca en todos los pueblos y en todos los que luchan por su emancipación definitiva.

Como consecuencia inmediata de la organización de la Internacional, se declararon en huelga en Nueva York más de cien mil obreros; el invierno de 1873–74 fue tan crudo y la paralización de los trabajos tan grande, que muchos miles de hombres sufrieron los horrores de una muerte lenta por el hambre y el frío. Los obreros sin trabajo de Nueva York se reunieron en una imponente manifestación el 13 de enero de 1872, para que el público apreciara su estado de pobreza, y cuando la plaza pública estaba materialmente cubierta con hombres, mujeres y niños, la policía acometió brutalmente por todas partes a la manifestación, disolviéndola en medio del mayor espanto de aquellos hambrientos indefensos. Este acto bárbaro, esta incalificable conducta de la fuerza pública, deben anotarla en cartera los apologistas de las libertades americanas.

Desde 1873 a 1876 fueron muchas las huelgas que se registraron en los Estados de Nueva Inglaterra, Pensilvania, Illinois, Indiana, Misuri, Maryland, Ohio y Nueva York, a manera de preámbulo de los últimos acontecimientos. Las grandes huelgas de los empleados de ferrocarriles en 1877 fueron el comienzo indudable del conflicto entre el capital y el trabajo. Finalmente, en el año 1880 quedó organizada la Federación de los Trabajadores de los Estados Unidos y Canadá, y en octubre de 1884 se acordó, en una reunión celebrada en Chicago, que se declarase el 1º de mayo de 1886 la huelga general por las ocho horas. En la fecha acordada estalló en aquella población la huelga, y desde luego obtuvieron un triunfo completo los constructores de edificios, los tabaqueros y otros oficios.

Hay que tener en cuenta que los canteros de Chicago no trabajaban más que ocho horas desde 1867 y que muchos Estados se apresuraron a decretar la jornada legal de las ocho horas, decretos y leyes que fueron por completo letra muerta, pues los burgueses prescinden de ellas, como hacen siempre lo que conviene a sus intereses. En conclusión: más de 200.000 obreros de los Estados Unidos habían obtenido a mediados de mayo de 1886 una reducción de horas y otras ventajas. De 110.000 obreros que habían en Chicago y sus alrededores, se declararon en huelga 47.500, obtuvieron triunfo completo sin gran esfuerzo.

Esta rápida reseña del movimiento obrero en los Estados Unidos demuestra que desde 1832 a 1853 se consiguió una reducción general de tres horas en la jornada de trabajo; que los obreros, después de agotar todos los medios legales pidiendo al Estado lo que no puede dar, se decidieron por las ideas revolucionarias y por la huelga general; como único medio de luchar ventajosamente con el coloso de la explotación, y demuestra así mismo que, a pesar de las brutalidades de la policía y de los burgueses, instigadores, la jornada de ocho horas se impone.

Es un país en que las industrias textiles mantienen en Pensilvania a 5.300 niños menores de quince años; 4.300 niñas menores de catorce, y 27.000 mujeres y muchachas de mayor edad en un trabajo penoso; en una ciudad como Filadelfia, donde los niños trabajan en los almacenes, en las tiendas, y en las fábricas catorce y dieciséis horas diarias; sólo en las fábricas de New Jersey se explota a 15.000 niños de ocho a quince años; en un país donde la relación de los niños menores de quince años ocupados en diferentes trabajos al número de todos los demás obreros es de 3 a 7 y de 2 a 5, casi la mitad; en un país tal, tiene que ser necesariamente muy enérgica la actitud de los trabajadores para suprimir de una vez por todas estas infamias que matan lentamente a los padres y a los hijos, a los adultos y a los muchachos, a las mujeres y a los ancianos. en este país, que goza fama de rico y libre, y sin embargo, los obreros sufren tan terrible explotación y viven tan miserables que tienen que arrojar a sus hijos a las rudezas de la faena diaria durante muchas horas; allí, repetimos, es lógico, es necesario que se luche a brazo partido con la burguesía, y se dé el impulso a otros países donde los trabajadores no han comprendido bien toda la extensión y la gran verdad de sus males.

En Norteamérica nació la idea de iniciar la huelga general, y ya hemos visto como la clase trabajadora ha respondido en todas partes a aquella iniciativa. De Chicago partió la primera señal, y apenas ha transcurrido tiempo apreciable cuando la lucha se ha generalizado de un modo imponente. Los poderosos republicanos federales de américa han querido detener el movimiento sacrificando a unos cuantos propagandistas, pero el movimiento arrolla hoy todos los obstáculos y se sobrepone a todas las resistencias. Todo es pequeño ante esta preponderante manifestación de las fuerzas revolucionarias.




Carta de Miguel Bakunin a Anselmo Lorenzo



Estimado ciudadano:

Algunos amigos de Barcelona acaban de comunicarme, sólo ahora, que, preguntado por ellos sobre mi persona, a su regreso de Londres, usted les habría respondido con esas palabras:

”Si Utin* dijo la verdad en Londres, Bakounine es un miserable. Si no es la verdad, Utin sólo es un vil calumniador."

Seis meses transcurrieron, aproximadamente, desde que usted planteó ese dilema. Y si los amigos de Barcelona no se hubieran decidido al final avisarme hoy yo ignoraría aún que el señor Utin se divirtió en calumniarme de modo infame en Londres lo que por lo demás de parte suya no me sorprende, puesto que cada hombre hace por naturaleza lo que su propia índole le manda. Ahora sé por lo menos que me calumnió, pero desconozco el tenor de sus calumnias. En efecto usted debe saber, ciudadano, que mis compañeros y amigos, los herejes de la Federación Jurasiana, que la ortodoxia oficial e inquisitorial del Consejo General de Londres acordó castigar con la excomunicación mayor, colocándoles con arbitrariedad fuera de la Internacional, y yo que, desde hace tres años, vivo casi aislado en Locarno, no sabemos casi nada de lo que pasó, se dijo y fue resuelto ya sea en las sesiones oficiales, ya sea entre bastidores y en los conciliábulos más íntimos de aquella famosa Conferencia de Londres que, lo temo mucho, no fue más que un golpe de estado montado por gentes hábiles, para establecer en la Internacional la dominación de una pandilla excesivamente intrigante y ambiciosa y autoritaria hasta el supremo grado.

Vuelvo a mis calumniadores. Hablo de ellos en plural, porque usted no debe imaginar que ese mezquino judío ruso que se llama el señor Utin sea el principal y el único. Lo que dice y lo que hace no puede tener importancia sino porque es el instrumento del gran jefe de la sinagoga, el ciudadano Marx. Le dije a usted que ninguna mentira, ninguna calumnia, ninguna infamia procedente de Utin podrían sorprenderme; atormentado por una ambición y por una vanidad que sólo se igualan a su nulidad; la boca siempre llena de palabras pomposas, que aprendió al dedillo, y que va repitiendo como un papagayo, con la voz sonora, los ademanes patéticos, pero con el corazón absolutamente vacío de todo otro objeto que sí mismo, y con la cabeza incapaz de concebir y desarrollar una idea; superficial sin vergüenza, descarado mentiroso; cobarde y poltrón cuando no se siente sostenido, pero con una arrogancia fabulosa, del todo judía, cuando hay una masa muscular detrás suyo; versátil y muy falso, inclinando el lomo ante quien le parece influente y brillante, lisonjeando al proletariado con las burdas manifestaciones de una humildad y un respeto hipócritas, cambiando al fin los principios como otros cambian de ropa, según las exigencias del medio y del momento, ese diminuto miserable no tiene otra fuerza que su rematada altivez, su consciencia sin vergüenza, su incontestable talento para la intriga y una docena de mil libras de renta que le colocan muy bien dentro del partido de la reacción hoy dominante en la Internacional de Ginebra. Nuestro amigo, Pellicer Farga de Barcelona, le podrá dar una idea perfectamente justa del partido de que le hablo, por haberlo visto proceder tanto en Ginebra como en el Congreso de Basilea. Ese partido, del que el señor Henry Perret que usted debió de encontrar en Londres es un muy digno representante y que se compone de la flor y nata de los ciudadanos-obreros de la relojería, se ha vuelto hoy muy poderoso en la Internacional de Ginebra, gracias al doble apoyo de los burgueses radicales para quienes acepta servir de instrumento y estribo, de un lado, y del Consejo General de Londres dirigido por la pandilla marxiana, del otro. 

Aprovechándose de esa alta protección, transformó no al pueblo, sino la organización de la Federación Romanda, dado que está representada por sus comités y su periódico oficial, L'Egalité, en una muy sucia intriga reaccionaria, y el señor Utin se encuentra naturalmente en su lugar.

Para acabar con él, añadiré que habiéndole hallado por vez primera en 1863 en Londres, y apreciado a su justo valor, siempre lo mantuve alejado de mi intimidad lo que valió por supuesto de parte suya un odio atroz. Ese odio lo había incubado silenciosamente en su pecho mientras no había encontrado un apoyo formidable en el odio mucho más serio que me dedica el ciudadano Marx. Sé de fuente segura, y podré probárselo de ser necesario, que Marx no sólo acogió favorablemente, sino que provocó las calumnias de Utin. Ya en 1870, cuando en nombre del Consejo General, Marx remitía a todos los Consejos o Comités regionales de la Internacional, una circular confidencial, redactada en alemán y en francés al mismo tiempo y llena, al parecer, de invectivas injuriosas y calumnias contra mí. Es un hecho de que sólo tuve conocimiento hace unas semanas, gracias al último proceso de Liebknecht. En los primeros meses de 1870, Marx escribía ya a Utin, encomendándole que reuniera cuantos documentos pudieran servir de base a una acusación contra mí ante el próximo Congreso. ¡Usted puede imaginar cómo Utin se las ingenió para hallar e inventar algo! Y a fuerza de falsedades consiguieron, dicen, fraguar todo un sistema de calumnias que, por ridículas que son, no dejan de ser odiosas calumnias en las cuales ellos mismos tan poco confían, que nunca se atrevieron a publicarlas, conformándose, ¡digna gente es esa!, con propagarle confidencialmente por medio de sus circulares, sus agentes y sus cartas, a espaldas mías. Ahora bien cómo forzarles a osar introducir cuestiones de personas en los debates de la Internacional y di una gran prueba de esta repugnancia, puesto que, a pesar de todos los ataques de mis enemigos, he guardado el silencio durante casi tres años, estaré en la obligación de hacerlo dentro de poco. 

En esta carta, que considero como el inicio de una lucha que deploro, pero que no puedo ya evitar, me conformaré con indicarle a usted las dos principales causas. Mis amigos y yo, cometimos dos grandes crímenes: uno personal, y otro relativo a los principios. Pese a rendir completa justicia a la inteligencia, la ciencia del ciudadano Marx, así como a los servicios que prestó a la causa del proletariado, nunca quisimos inclinar nuestras cabezas ante él, ni reconocerle como nuestro jefe, por tener todos la idolatría en horror, y una aversión profunda, instintiva y reflexiva al mismo tiempo, por cuanto se denomine autoridad, gobierno, tutela, individualidades dominantes o jefes. Este es nuestro crimen personal. Es una rebelión contra quien, en su pío entusiasmo, el señor Liebknecht, uno de los rabinos subalternos de la sinagoga, llama "su preceptor".

Nuestro crimen relativo a los principios no es menos grave. Nos atrevimos a oponernos a la teoría de Marx, teoría esencialmente pangermánica y autoritaria, de la emancipación económica del proletariado y de la organización de la igualdad y de la justicia por el Estado, el principio latino eslavo, anárquico y rebelde de la abolición de todos los Estados. En consecuencia de ese principio, combatimos las tendencias, hoy demasiado ostensibles de la pandilla marxiana, al establecimiento de una disciplina jerárquica, de un gobierno y de una dictadura enmascarada en la misma Internacional, en provecho de un consejo general cualquiera. 

Tanto como los belgas, antes de ellos, el Congreso de la Federación Internacional del Jura proclamó, conforme a los estatutos generales primitivos, los únicos obligatorios para todas las secciones de la Internacional, que el Consejo General, por no ser y no tener que ser revestido de poder gubernamental alguno, es únicamente una Oficina Central de Estadística y Correspondencia, al mismo tiempo una suerte de bandera simbólica de la unión fraternal que debe existir entre los proletarios de todos los países.

* Nicolái Utin (1845-1883), fue un político socialista marxista ruso, participante de la Primera Internacional.

Hijo de un rico comerciante de licores ruso-judío, tuvo que refugiarse en Suiza a causa de sus ideas políticas. En 1863 colaboraba con la causa revolucionaria polaca. En el exilio suizo fue partidario de las ideas de Karl Marx, y delegado de la sección rusa en el exilio de la Primera Internacional en Ginebra, en 1870. 

Utin se enfrentó durante las discusiones de esta organización con Mijaíl Bakunin, actuando como informante de Marx. Una vez disuelta la Primera Internacional, retornó a Rusia perdonado por el zar, haciendo una fortuna como especulador durante la guerra.

Mártires de 1907. Documental histórico de Río Blanco






Documental del canal 11 del IPN (Instituto Politécnico Nacional), sobre la historia de Río Blanco y el suceso que aconteció un 7 de Enero de 1907, donde los trabajadores de la fábrica Río Blanco sucumbieron por órdenes de Porfirio Díaz, al solicitar mejores condiciones laborales y salario justo.

El Congreso de la CNT (1936). Juan Pablo Calero


J.P. Calero
La historia de la Confederación Nacional del Trabajo (CNT) es un fiel reflejo de la convulsa España de su tiempo. Constituida en 1910, fue ilegalizada al año siguiente con motivo de una convocatoria de huelga general en un clima de violento conflicto social. No recuperó su normalidad orgánica hasta 1914, para ser de nuevo puesta fuera de la ley a causa de la huelga general del verano de 1917, convocada en esta ocasión junto con la Unión General de Trabajadores (UGT). 

Autorizada de nuevo, desde 1918 fue sin embargo ferozmente perseguida en Cataluña, eje vertebrador del anarcosindicalismo hispano, por el pistolerismo patronal y la ley de fugas policial, un acoso sangriento que no terminó hasta que el golpe de Estado del general Miguel Primo de Rivera ilegalizó, ¡otra vez!, a la CNT en septiembre de 1932.


Retornó a la luz pública en vísperas de la proclamación de la Segunda República, tras las elecciones del 12 de abril de 1931, pero fue temporalmente suspendida su actividad en 1933, por las algaradas revolucionarias de Andalucía y Aragón, y de nuevo en 1934, como consecuencia de la Revolución de Octubre en Asturias. De nuevo libre y activa a partir de febrero de 1936, el estallido de la Guerra Civil el verano de ese mismo año la condenó a muerte en el territorio controlado por los militares rebeldes, que fueron reduciendo el espacio vital del anarcosindicalismo. Hasta 1977 no pudo dejar oír libremente su voz en España, si bien desde entonces siguió contando con el acoso de los poderes políticos y económicos.

Contrasta esta azarosa trayectoria con la de la otra central obrera, la UGT, que desde su fundación en el año 1888 sólo fue puesta fuera de la ley, y muy brevemente, en 1917 y en 1934, antes de que la larga noche de piedra del franquismo cayera sobre todos los españoles. Este agudo contraste nos puede hacer suponer que la UGT sería la organización sindical mayoritaria entre el proletariado, pues su vida orgánica y su presencia pública, constante y sin sobresaltos, atraerían con más fuerza a los trabajadores que una CNT que pasaba continuamente de la barricada a la cárcel.

El Comité Nacional de la CNT convocó un congreso que se celebraría en Zaragoza en los primeros días del mes de mayo; todos los cenetistas eran conscientes de su importancia y de los retos a los que se enfrentaban. Quizás por eso mismo, las actas del Congreso de 1936 ya fueron publicadas, pero nunca se había hecho un estudio de los sindicatos y federaciones locales que asistieron al comicio, una información que fue publicada en Solidaridad Obrera de Barcelona durante los días del congreso y que resulta imprescindible para conocer la realidad del anarcosindicalismo en vísperas de la revolución social.


El primer dato sorprendente que se deduce del censo de afiliados que asistieron al Congreso confederal de 1936 es que no sólo la mayoría de esos campesinos insurrecionalistas no estaban sometidos a la orientación libertaria, sino que, por el contrario, la mayoría de los anarcosindicalistas trabajaban en la industria y los servicios; el primer prejuicio que debemos desterrar es ese carácter campesino de la CNT. La central anarcosindicalista se nutría, en su inmensa mayoría, con trabajadores del ámbito urbano. Incluso en la Regional Andaluza, que reunía a las ocho provincias andaluzas con la de Badajoz y los afiliados de Ceuta, Melilla y el Protectorado de Marruecos, de los 155.720 cenetistas presentes en el comicio de Zaragoza casi la mitad, 74.401 exactamente, pertenecían a las federaciones de las capitales y de los grandes núcleos urbanos, como Jerez de la Frontera, Algeciras, Linares y Mérida.

En cualquier caso, basta un repaso somero a las cifras de sindicatos adheridos para darse cuenta que la CNT estaba implantada más allá de la Barcelona industrial y la Andalucía jornalera. Cataluña y Andalucía sumaban 292.421 de los 485.515 afiliados, es decir, un 60 por ciento del total de afiliados directamente representados en el comicio. Pero es fácil comprobar que la zona costera de Galicia, con más de 20.000 militantes, la comarca de Gijón, con unos 15.000 cotizantes, la provincia de Valencia, con otros 20.000 afiliados, y en general todo el Levante español, eran zonas de amplia mayoría anarcosindicalista. Otros focos con menor radio de acción se encontraban en la costa de Guipúzcoa, con casi dos millares de adheridos, la isla de Tenerife, con 10.000 sindicalistas, y las ciudades de Ceuta y Melilla, que extendían su influencia en el Protectorado de Marruecos como lo muestra el Grupo Sindical de Tánger, en las que la CNT era la fuerza hegemónica.


Con una crisis social y económica tan grave como la que vivían los trabajadores españoles del campo y la ciudad en esos años, cegadas las vías de solución política por la incapacidad de los dirigentes republicanos de uno y otro signo de asumir riesgos, y hartos de esperar que la República diese satisfacción a sus eternas demandas, las clases populares apostaban cada día más por la vía revolucionaria. Y para profundizar en esa opción la CNT, recién salida de la clandestinidad, convocó un Congreso en la ciudad de Zaragoza, sede provisional del Comité Nacional, para el 1 de mayo de 1936.

La historiografía más académica ha confundido interesadamente la propuesta revolucionaria de la CNT con el insurrecionalismo violento que salpicó la accidentada biografía de la Segunda República y que aún se presenta por muchos historiadores como un fenómeno ajeno al movimiento sindical del que se responsabiliza a los cenetistas, acusados de impulsar las algaradas y levantamientos obreros y campesinos para practicar una “gimnasia revolucionaria”. Se llega a decir que la opción revolucionaria desarrollada por los faístas en el seno de la CNT cortocircuitó la estrategia de moderación sindical de los trentistas y torpedeó las reformas laborales puestas en marcha desde el gobierno por Francisco Largo Caballero, con el apoyo de la UGT de la que el estuquista madrileño era líder indiscutible desde la muerte de Pablo Iglesias.


Así pues, se carga en el debe de la CNT el fracaso de la Segunda República, que se vio privada del apoyo de los trabajadores que optaron por la vía revolucionaria, a causa de la perniciosa infiltración ácrata, y de la burguesía que se mostraba inquieta y temerosa por las constantes alteraciones del orden público. Pero parece olvidarse que aquellos sindicatos confederales que disintieron de la línea marcada por la amplia mayoría de los cenetistas se desfederaron muy pronto de la CNT y mantuvieron libremente su propia actividad sindical; no puede reprocharse a los anarcosindicalistas que los trabajadores no apoyasen a los llamados Sindicatos de Oposición y se mantuviesen fieles a la Confederación anarcosindicalista.

Sorprende, en primer lugar, que el Sindicato con más afiliados de los que asistieron al comicio de Zaragoza fuese el de la Construcción de Madrid, que tenía casi 17.000 afiliados antes de la huelga de ese verano, que aumentó extraordinariamente su influencia. Es muy significativo que los anarcosindicalistas hubiesen superado al sindicato socialista madrileño, al que pertenecía el propio Francisco Largo Caballero. Los datos de 1936 demuestran que la CNT estaba implantándose con fuerza creciente en la capital de la República; el tradicional mapa sindical se estaba rompiendo en beneficio de los anarquistas.


Pero Madrid no era una isla en la Meseta. En otras localidades de ambas Castillas la CNT se había convertido en la primera fuerza sindical; así ocurría en ciudades populosas como Cuenca, Soria, Puertollano o Aranda de Duero y en pueblos de tamaño medio como Membrilla, Brihuega, Béjar o Arcos de Jalón. O bien representaba una fuerza que había que tener necesariamente en cuenta, como sucedía en Valladolid y Salamanca. En mayo de 1936 la CNT estaba venciendo su dificultad para organizarse en la Meseta Central y agrupaba a un número creciente de trabajadores.

Los rebuznos de un tal Jorge Orts



He aquí un claro ejemplo del por qué los apartidistas despreciamos a los "científicos marxistas", porque son mentirosos por naturaleza, taimados por estrategia y engañabobos por vocación. El texto que hoy comparto con vosotros es un claro ejemplo de una "ciencia" argumentada por alguien que posee baba de caracol en lugar de masa gris. En esta ocasión veremos en qué consiste eso de la propaganda marxista, muy efectiva por cierto, cosa lógica en un país de paletos sabihondos como el nuestro. Comprobaremos el nivel de desverguenza que pueden alcanzar estos "apóstoles de Marx". Todo vale si ello sirve a su causa, no importa pegarle una patada a la historia para moldearla según convenga, ¿qué más da?, si quienes lean estos rebuznos son todavía más burros que quien los perpetró; los propagandistas marxistas tienen todo un campo virgen para sembrar su semilla de engaño al pueblo.

El imbécil integral que transcribe estos rebuznos al papel es un tal Jorge Orts (Orto en castellano). Escupe cosas como éstas <<desde que Bakunin lo formulara, el anarquismo se convierte en un enemigo ideológico del marxismo leninismo>>. Valiente paleto venido a más, cuando Bakunin muere Lenin tenía seis años.

Todos son tópicos sin argumentación histórica alguna, ¿está sano mentalmente hablando alguien que califica a los anarquistas de pequeño burgueses? ¿se puede ser más imbécil? difícilmente superable oigan, ni si quiera merece discusión, puesto que la mentira sólo se desmiente, nunca se discute.

Esta chusma humana es la que pide unidad de los de abajo... pero claro, unidad de pensamiento, puesto que su doctrina significa el fin de la inteligencia y el reinado de la mentira impuesta. Para pedir unidad deberían aprender primero a respetar. A estos solamente les importa alcanzar el poder, intentando engañar a todo incauto que caiga en sus garras. Al principio todo es muy bonito, te llaman compañero, o incluso camarada, pero después te exigen "disciplina de partido", o lo que es lo mismo, obediencia debida a los líderes, lo dicho, el fin de toda inteligencia.

Bueno, el texto ya se comenta por sí solo y de todas maneras estas gilipolleces tampoco merecen demasiada reflexión, son simplemente una prueba de que estos tarados autodenominados marxistas leninistas (siempre refiriéndome a los dirigentes y a sus "intelectuales" voceros, nunca a las bases) están dispuestos a mentir impúdicamente y a engañar a todo el que caiga en sus redes al igual que hizo el criminal de Lenin; una vez alcanzado el poder se purgarán quienes puedan hacer sombra al lider encumbrado y se exigirá a todo el pueblo que obedezca sin rechistar, bajo amenaza de ser acusado como contrarrevolucionario si se te ocurre contestar, puesto que la revolución son ellos y nunca el pueblo. Os dejo con esta sarta de rebuznos trasladados al papel, parece de chiste, pero lo triste es que existan personas que se crean estas estupideces que no se las cree ni quien las escribió, pero que al parecer resultan válidas y efectivas para alcanzar sus fines de dominación dictatorial intransigente.

El oportunismo anarquista. Jorge Orts

Es frecuente escuchar que el marxismo-leninismo es una corriente parecida al anarquismo y que solo se diferencian en matices. Pero estamos ante una afirmación totalmente falsa. Desde el nacimiento del socialismo científico surgen corrientes hostiles que intentan dañarla, entre ellas el anarquismo. Desde el momento de la elaboración de la teoría anarquista por Bakunin, el anarquismo se convierte en un enemigo ideológico del marxismo-leninismo.

El anarquismo como pensamiento ideológico toma fuerza a mediados del siglo XIX. Las diversas corrientes que conviven en el anarquismo es fruto del movimiento reaccionario de la pequeña burguesía. Esta pequeña burguesía observaba perpleja como el sistema capitalista y el modo de producción avanzaba a pasos agigantados y devastadores en su desarrollo histórico hacia una fase imperialista donde el pequeño burgués no entraba en sus planes, viéndose obligados a formar parte de la clase trabajadora. Su único camino era retroceder pidiendo, arañando y luchando por la vuelta de un capitalismo librecambista, donde ellos tenían un mínimo de control y poder, una diferenciación entre ellos y el proletariado. Para ello culpan al estado de todos sus males y luchan contra la Revolución Industrial y el desarrollo de las grandes producciones capitalistas. Así el pensamiento anarquista cala en los pequeños propietarios y en el campesinado con pequeños privilegios. La poca experiencia de la clase obrera en el ámbito político es lo que permite al anarquismo tomar algo de protagonismo, conforme este hecho va cambiando el anarquismo pierde el poco peso que iba teniendo en la clase obrera.

En 1868 Bakunin entra en la Internacional Socialista con el objetivo de defender sus intereses pretendiendo que esta pierda su carácter obrero, introduciendo ideas pequeñoburguesas, partiendo de una elaborada base idealista de la realidad para compensar su falta de bases científicas en sus análisis. Así Marx expone un paso intermedio entre la sociedad capitalista y la comuna, el socialismo, para la extinción de las clases, mientras que el anarquismo expone una extinción radical del estado, donde no se suprimen las clases y la pequeña burguesía se ve beneficiada. Tanto el anarquismo como el marxismo-leninismo ven necesaria la desaparición del estado, aunque de forma muy diferente. El anarquismo coge al estado como una entidad abstracta y la culpa de todos los males, por lo que únicamente se centra en la abolición del estado. El marxismo-leninismo parte de un análisis científico de la sociedad, por el que determina que el estado es un instrumento de la clase dominante, en este caso la burguesía, para seguir manteniendo su hegemonía, así expone la necesidad de un estado proletario que defienda los intereses populares y de los trabajadores. La burguesía siempre va a necesitar una clase trabajadora y obrera a la que explotar, mientras que la clase obrera puede vivir sin una burguesía que les robe y explote. De tal forma que un estado proletario que defienda los intereses de los trabajadores terminara aboliendo la sociedad de clases hasta el punto de la extinción del estado. La ideología anarquista al estar en contra de cualquier representación del estado, lucha contra este aunque sea de carácter proletario, de tal forma que una sociedad anarquista seguiría manteniendo la desigualdad que surja debido a las clases sociales.

La concepción del capitalismo por parte de la ideología anarquista lleva a la abstención política, estando en contra de los partidos. De tal forma que la única vía para la lucha seria formando cooperativas al margen del estado y esperando que las masas se unan de forma espontánea. Aun así, contando con que la concepción anarquista se les apareciese como un rayo de iluminación a todo el pueblo, la burguesía y el estado capitalista no dejarían que la pequeña burguesía controlase los medios de producción. El marxismo-leninismo llama a la cordura mediante el análisis científico, pidiendo realizar una estructura férrea de extracción obrera y popular capaz de combatir contra el capitalismo. Desde el mismo momento de la revolución obrera comienza la extinción del estado.

El anarquismo renuncia al análisis científico superponiendo el idealismo y por supuesto renunciando al materialismo dialectico, intentando eliminar el estado y no la sociedad clasista en la que vivimos, fortaleciendo a la pequeña burguesía y no a los trabajadores.

Página web donde han sido perpetrados estos rebuznos

La Anarquía explicada a los niños. José Antonio Emmanuel



La publicación de este folleto, según nota del grupo editor, surgió «para contestar a la pregunta que nos han formulado varios camaradas: ¿Cómo educaré a mis hijos?» y está dedicada a los padres y a los maestros «para que —en el hogar y en la escuela— propaguen las sanas doctrinas de una educación donde se destierre todo fanatismo y se aspire a libertar a la infancia de la nefanda opresión que sobre ella se ejerce».

José Antonio Emmanuel

«…Débiles y pequeños, los niños son, por eso mismo, sagrados…»

ELISEO RECLUS


José Antonio Emmanuel fue un maestro seguidor de Ferrer y Pestalozzi que impulsó a comienzos de los años treinta del pasado siglo la Biblioteca Anarquista Internacional (B.A.I.), con sede en Barcelona. Entre los folletos divulgativos que publicó se encontraba "La Anarquía explicada a los niños" (1931), donde en 15 páginas se hacía un repaso de lo que significaba la Anarquía, la manera de llegar a ella y finalizaba con una serie de postulados ácratas que era necesario llevar a la práctica para hacer efectiva la Anarquía: 

1. Ayuda; 2. Apoya; 3. Copia lo bello; 4. Labora; 5. Estudia; 6; Ama; 7. Protege; 8. Cultiva; 9. No tengas esclavos; 10. Trabaja.


El país de los Hijos de Caín


Aquí nadie parece darle importancia a lo que realmente la tiene. Los marxistas se dan de pedradas entre ellos mismos, al parecer están subdivididos (con el factor común de venerar a Marx) en varias piaras ideológicas. Unos dicen ser trotskistas, otros eurocomunistas, algunos (los menos) stalinistas, los leninistas y también nos encontramos con los "puristas", los que siguen a rajatabla lo que dijo Marx; incluso existen algunos descerebrados terminales que se autodenominan maoistas.  

Todos ellos están en posesión de la verdad más absoluta, y por lo tanto, el resto no son más que ignorantes. Según parece aquí lo que cuenta no es el bien común, no señores, sino demostrar quien tiene razón, si el sádico criminal Trotsky, el genocida Stalin, el impostor Lenin o el viejo y taimado Marx, la opinión de nuestros vecinos no cuenta para éstos, o al menos eso parece, sólo les interesa lo que dijeron probados criminales y traidores de su pueblo. ¿Acaso se puede uno asociar con personas que veneran a genocidas y sádicos criminales como los antes citados?, quien no condena los crímenes de Stalin, Lenin, Trotsky o Líster, se pone a la misma altura que quienes justifican las atrocidades cometidas por Hitler, Mussolini o Franco.


Viñeta creada por bolivarianos

Por otra parte nos encontramos a los anarquistas o libertarios, y desgraciadamente chocamos con las mismas estupideces ideólogicas que sólo conducen al enfrentamiento entre iguales y favorecen la sonrisa de los de arriba. No seré yo quien de a nadie lecciones de nada, mucho menos sobre anarquismo, pero de lo que sí estoy firmemente convencido es de que mi opinión vale tanto como la de cualquiera... y es igualmente rebatible; sólo puedo decir que quienes se dedican a vociferar en lugar de argumentar, quienes buscan vencer sin antes convencer o aquellos que pretenden poseer la verdad por cojones y nunca con razones, no creo que defiendan ni su libertad ni mucho menos la mía. Lo que realmente interesa en estos momentos críticos, momentos en los que nos estamos jugando cruzar la línea de no retorno, son las soluciones; discutir entre iguales sobre nimiedades ideológicas está muy bien para la taberna, pero en la calle lo que necesitamos es unidad en lo que realmente importa, los detalles llegarán después.



El ciudadano corriente y moliente no entiende de estas cosas, y bien que hace, todo esto le parece una disputa entre gallos para hacerse con el control del corral, y por lo tanto se siente absolutamente ajeno a la política... o por lo menos de los que dicen buscar el bien común gastando más energías en denigrar a quien pueda restarles votos o rebatir sus "verdades" que en buscar soluciones. Cuando ven una manifestación repleta de banderitas o trapos coloreados con las siglas de los diferentes partidos o sindicatos, inmediatamente se sienten ajenos a esa lucha, porque en esa manifestación son pocas las personas que van a título personal, solamente para defender lo suyo y lo de todos, no para servir a la causa de éste o aquel partido u sindicato. 

Muchos de ellos portan banderitas de la II República, en su inmensa mayoría son púberes que no tienen ni pajolera idea de lo que significó para los obreros esa pantomima que se autodenominaba "república de los trabajadores". Otros tantos ostentan orgullosamente la bandera roja con la hoz y el martillo; si lo que éstos quieren para mi tierra es un gobierno dirigido por militares disfrazados de pueblo y supuestas "elites intelectuales", siempre me tendrán enfrente, a mí y a toda persona decente. Y aunque resulte polémico y no lo escriba con ánimo de juzgar a nadie (Odín me libre de tal tentación) ¿de qué ostias sirve llevar una visible A y liarla parda? aunque claro, buena parte de éstos que salen por Tv y que supuestamente son anarquistas, en su gran mayoría son maderos disfrazados. 

Lo ocurrido el 22-M no fue más que fruto del profundo asco que todos sentimos al ver a trabajadores y chavales machacados a palos por los perros del Estado; pero no nos equivoquemos, por medio de la violencia siempre llevaremos las de perder, y en mi modesta opinión, en estos momentos históricos y de desidia obrera absoluta, debemos convencer a nuestros iguales sobre cual es su poder. Los actos violentos, muchas veces causados por la desesperación lógica de un jóven sin futuro o un padre que no llega a fin de mes, son usados por la reacción para dejar en evidencia a la más sublime Idea parida por la mente humana, aunque los asesinos sean ellos. Los actuales verdugos quieren criminalizar a todo un pueblo, como hicieron sus padres y abuelos.

Esta podrida sociedad solamente podrá autorregenerarse, nunca sanará de su demencia gracias a varios iluminados, élites intelectuales, vanguardias revolucionarias y demás chorradas, sin la complicidad de todos los de abajo nuestra lucha está perdida de antemano... y muchos de los de abajo también votaron al PP, los fachas han sido más convincentes porque su unidad es indiscutible.

Pero ¿cómo podemos pedirle su complicidad al ciudadano medio español poco docto en temas políticos si ni siquiera somos capaces de crear un frente común entre nosotros? ¿con qué legitimidad moral le decimos a todos los obreros de nuestra tierra que debemos unirnos cuando quienes se suponen más concienciados no paran de discutir entre ellos por egos, vanidades y estupideces varias, cuando no por bastardos intereses partidistas? 

La solución a todos los problemas que padecemos no parece necesitar de un conocimiento erudito, pregúntenle sino a cualquier vecino oigan. Pero no, es mejor hacer creer a la gente que es muy complicado cambiar el estado (animal) de las cosas, pero ¿mejor para quién? Resulta que los sociatas, los mismos que pactaron con el PP cambiar la maldita constitución para que primero cobren los bancos y después, si sobra algo, que coma el pueblo, ahora son los defensores de los pobres, el partido de los obreros. IU decía que los del PSOE son la misma mierda que el PP, pero no nos contaron que ellos salieron también del mismo culo... hasta que pactaron con el PSOE en Andalucía y lo hicieron público.


La mafiocracia tiene asegurado su futuro y nuestra desgracia; de nosotros, y solamente de nosotros depende el que seamos merecedores de todo lo malo que nos ocurra o que disfrutemos de lo que nos pertenece por derecho de nacimiento. Nuestra opinión cuenta menos que la del pez pequeño devorado por el tiburón, puesto que la mafiocracia solamente necesita de una participación del 30% para legitimar sus sucias elecciones, y encima tienen la desfachatez de llamarlas sufragio universal, ¿acaso el león le preguntó alguna vez a la gacela si le dolía lo que le estaba haciendo? je. Están tranquilos mientras los de abajo se dan de ostias entre ellos, porque la unidad de los que mandan siempre estará garantizada y supuestamente legitimada por sus víctimas.

Por medio de unas elecciones nunca seremos un país decente, Franco lo dejó todo bien atado para que así fuese y los norte americanos enseñaron a nuestros políticos como robar y engañar impunemente. En el muy hipotético (imposible diría yo) caso que apareciese un partido político realmente de izquierdas y decente, un partido que consiguiese desbancar al PPSOE, estoy seguro de que ocurriría lo mismo que ha pasado en Alemania, los engaña viejas socialdemócratas se unirían a los gusanos demócratas cristianos para <<evitar el ascenso de los radicales>>, como si lo estuviese viendo oigan.

Así que sigan con sus peleas "ideológicas" que asemejan más a discusiones futboleras de taberna mal oliente que a razonamientos prácticos y precisos. Si te importa más lo que dijo el criminal de Trotsky que la desesperación que reina a tu alrededor, pronto serás presa de ella también. Si lo que te interesa es que voten a tu partido para poder sentarte a la mesa con los que mandan, no esperes la simpatía del que no puede darle a sus hijos todo lo que merecen. Si te autodenominas anarquista o libertario pero sólo miras a los lados en lugar de hacia arriba, sólo eres un ignorante prepotente. Si los productores somos el 90% y los acaparadores y beneficiarios sólo el 10% ¿por qué estamos donde estamos?  

Demostremos al mundo que Iberia fue ejemplo para todos en lo que respecta a la lucha social, volvamos a unirnos todos los desheredados antes de que la reacción se nos adelante. Ya han conseguido dividirnos, enfrentarnos, han comprado la dignidad del obrero con un TV de 38 pulgadas y un buen carro, pero ahora le han robado el caramelo de la boca y llora como un pobre huérfano que no tiene quien lo defienda; entonces se cabrea y le quita el caramelo a su amiguito más débil en lugar de darle una patada en los huevos al grandullón abusón. 

Sin partidismos que sólo sirven para dividir, sin líderes cantamañanas y de vanidad desmesurada, sin egoismos; lo que todos queremos es simplemente que nos dejen vivir en paz y con el respeto debido, poco más, y para conseguir esos mínimos que inevitablemente tendrán que ir a más, no necesitamos ni ideólogos ni ideologías, sino soluciones para los tiempos en los que vivimos, que no son ni mucho menos el '36 como a algunos les gustaría, ahora estamos aún peor. Si no somos capaces de unir fuerzas todos los de abajo, dentro de unos años sólo tendremos fuerza para trabajar 14 horas diarias y ganando ni siquiera para comer, así que seguid con vuestras "eruditas" discusiones mientras suenan abajo y que cuando esto explote lo haga de la peor de las maneras; con vísceras en lugar de cerebro, con bilis en lugar de corazón, porque este es el país de los Hijos de Caín. 
 

Nanga Parbat (Reinhold Messner)




Película que narra la vida de Reinhold Messner, el mayor alpinista de todos los tiempos, desde sus principios en los Dolomitas hasta el trágico descenso del Nanga Parbat, donde perdió la vida su hermano y compañero de escalada.


El Nanga Parbat (literalmente, Montaña Desnuda en urdu e hindi) es la novena montaña más alta del mundo y la segunda más alta de Pakistán. Su nombre se debe al hecho de que es una montaña muy aislada y separada del resto, por lo que la parte con nieves perpetuas destaca notablemene en el paisaje.


Es junto al K2 la única montaña que no ha sido escalada en temporada invernal. A lo largo de la historia del montañismo el ascenso al Nanga Parbat se ha cobrado numerosas víctimas, al punto de que fue llamada "la montaña asesina" por la expedición que logró en 1953 hacer la primera cumbre.

En 1970 los hermanos Günther y Reinhold Messner alcanzaron la cumbre a través de una ruta directa en la difícil y enorme cara Rupal, fue el tercer ascenso a la montaña. Su descenso fue épico: fueron incapaces de descender por el mismo lugar por el que habían subido, y en lugar de ello hicieron la primera travesía de la montaña, bajando por la cara Diamir. Desafortunadamente, Günther murió en un alud en el Diamir. En 2005 los restos de Günther se encontraron en la cara Diamir.


El final del Octubre Rojo [Documental]





Múrmansk, el puerto de la Flota del Norte rusa, fue uno de los semilleros de la Guerra Fría. Situado en el extremo noroccidental del país, era el escondite perfecto para los submarinos nucleares.

En una guerra nuclear, estos buques podrían llevarnos con toda su carga de megatones a un mundo postapocalíptico.

Actualmente, en aquel lugar solo quedan cantidades ingentes de material radioactivo: un desastre medioambiental en potencia, además de un reclamo evidente para terroristas.

Un equipo de ingenieros alemanes ha emprendido la descomunal tarea de limpiar este cementerio nuclear. En un gigantesco astillero ejecutan su plan consistente en desmantelar los más de 200 submarinos y rompehielos y almacenar los restos en un enorme depósito excavado en las profundidades del interior de la provincia de Múrmansk.

El documental relata la historia fascinante del final de una era que esperemos un día llegue a ser tan solo un recuerdo lejano de lo que pudo haberse convertido en un holocausto nuclear.

En España sólo existen los cojones para insultar al vecino, nunca para expropiar al ladrón



En Andalucía ya hemos superado al Alentejo portugués en lo que respecta a índice de paro y pobreza comparada con el resto de Europa. Mientras esto ocurre, vemos a diario por Tv como se ha estado saqueando al pueblo desde las instituciones públicas, pero al parecer debemos estar contentos, porque la Junta de Andalucía está gobernada por gente "rebelde" y de "izquierdas", más que un país de pandereta, parecemos una república bananera de majaretas. 

Andalucía (con una tasa del 36,3%), Ceuta (35,6%), Melilla (34,4%), Canarias (34,1%) y Extremadura (33,7%) son las regiones de la Unión Europea (UE) con más paro. En los diez primeros puestos de la clasificación se encuentran también Castilla-La Mancha (en séptimo lugar, con el 30,1%) y Murcia (noveno lugar, con el 29,4%), según un informe publicado este martes por la oficina estadística comunitaria, Eurostat, con datos de 2013. 


¿Qué somos, el culo de Europa o el norte de África? Entre las diez regiones de la UE con más paro, además de las siete españolas hay dos griegas (Dytiki Makedonia y Kentriki Makedonia) y una francesa (la isla de Reunión). Claro ejemplo de la indolencia hispana, en Grecia tienen dos regiones en este ranking, nosotros 7, ¿cuántas huelgas generales se han hecho en Grecia y cuántas en España? ¿cuánta gente asistió a las mismas? España siempre fue, es y será amante de sus cadenas y enemiga de la inteligencia, el sentido común es un bien escaso en este puto país de Sénecas de taberna.

Un total de 13 comunidades autónomas españolas registran una tasa de paro superior al 21,6 por ciento, el doble que la media comunitaria. Se trata, además de las que están entre las diez primeras, de Comunidad Valenciana (28,6%), Cantabria (24,1%), Cataluña (23,4%) Galicia (22,3%), Asturias (22,1%) y Castilla y León (21,7%). En Grecia son 10 las regiones que duplican la tasa de paro media de la UE, mientras que la lista se completa con dos departamentos ultraperiféricos de Francia y una región en Italia.

Por lo que se refiere al paro juvenil, también cinco regiones españolas se encuentran entre las diez de la UE con tasas más altas. Se trata de Ceuta (que encabeza la lista con el 72,7%), Andalucía (66,1%), Canarias (65,3%), Extremadura (61,7%) y Castilla-La Mancha (61,6%). Juventud sin futuro y mayores de 50 años condenados a la indigencia, ingredientes básicos para el estallido social, pero aquí no pasa ná.

Y lo peor de todo no son estas cifras incontestables, no compañeros, además de todo esto tenemos que ver a diario como los obreros frustrados por tantos meses de inactividad arremeten contra sus iguales, los inmigrantes. España es tan imbécil que culpa de sus males a los de abajo, resulta que la solución a estas infames cifras es expulsar a los inmigrantes o no dejarles entrar en nuestra mierda de país. La ignorancia supina y el miedo al diferente son el pan nuestro de cada día. La culpa del fraude fiscal la tiene el obrero que no paga el IVA, nunca los grandes empresarios chupasangres.

Sólo por llevar el pelo largo, barba o una cresta serás juzgado en el acto por tus vecinos, a la primera impresión; juzgado por seres insignificantes y acomplejados que necesitan denigrar a quienes les rodean para ellos sentirse alguien, por dementes que se llevan la mano a la cartera cuando pasas a su lado, pero en cambio entran sonrientes en el banco dándole la mano al director encorbatado y bien afeitado que les robará, monigotes de feria, eso es lo que son. 

Ya es que ni se habla de estas cosas, la inmensa mayoría de obreros sólo piensa en como salvarse él y los suyos, no quieren darse cuenta de que sólo la unidad podrá dignificar la vida de todos. A nadie (o a muy pocos) parece importarle la desgracia ajena, las conversaciones que podemos escuchar a la hora del bocadillo en el curro o entre nuestros vecinos, sólo hacen referencia al último fichaje del Madrid o la nueva pelea de alguna putilla famosa con el cabrón de su marido.


El españolito medio es tan pobrecito y básico que sólo pide trabajo; no le importa si este es digno o no, tampoco le importa demasiado si su sueldo da para poco más que pagar las deudas del mes anterior. Nunca se paró a pensar que él tiene el mismo derecho adquirido al nacer que todos los ricos, el disfrute de los placeres de la vida, llámense opíparas mariscadas, una bien nutrida biblioteca o la asistencia al teatro, el cine, la ópera, etc... Es un gran desperdicio menospreciar la capacidad de nuestro cerebro (la mayor maravilla conocida en el universo), una vida dedicada a apretar siempre el mismo tornillo en la cadena de montaje es una vida estéril, nacida muerta, sin sentido; no existe mayor estupidez que el no valorar lo que se esconde dentro de nuestro cráneo, por eso somos un país sin dignidad y capado mentalmente.

Los de arriba han dejado claro su plan, ya no nos quieren ni para explotarnos, así que el poco trabajo que hay debe de repartirse. Señores, comiencen a darse de ostias entre ustedes para conseguir la poca mierda de trabajo que hay. Y lo obreros españoles se disponen a darse de ostias entre ellos, porque en este país de eunucos siempre será más fácil atacar al igual que al poderoso, en España sólo existen los cojones para insultar al vecino, pero nunca para expropiar al ladrón. Me cago en Dios.


Fuente de las estadísticas:

http://www.lavanguardia.com/local/sevilla/20140415/54405028824/andalucia-lista-paro-ue.html

Una cofradía indulta a un banquero mangante probado y condenado




Por si no tuviéramos bastante con los indultos que dispensan nuestros despreciados gobernantes, nos enteramos también que en un país supuestamente laico como éste las hermandades de Semana Santa también sacan de la cárcel a malnacidos, en este caso un banquero mangante probado y condenado.


• La Cofradía de Nuestra Señora de la Piedad de Valladolid pidió el perdón al condenado, que trabajó en el Santander durante 11 años.

• Era el único empleado de la oficina de Esguevillas de Esgueva.

• Había sido condenado a dos años, cuatro meses y 15 días.

• La Audiencia Provincial y el Supremo rechazaron sus recursos.

• Es uno de los 21 indultos concedidos a las cofradías este año.


Cada año, cuando se acerca la Semana Santa, el Gobierno concede una ronda de indultos a distintas cofradías de todo el país. La tradición continúa en 2014 con 21 medidas de gracia, dos de ellas del consejo de ministros de este viernes y pendientes de publicación oficial y otras 19, las que nos ocupan, anunciadas tras la reunión del Ejecutivo del pasado 4 de abril y cuyos nombres completos y delitos conocemos hoy tras su publicación en el BOE.

Entre todos ellos se encuentra el indulto a Francisco Segundo Domingo Vaquero, concedido a la Cofradía Penitencial de Nuestra Señora de la Piedad de Valladolid. Este tal Domingo, cerdo sin escrúpulos ni moral, había sido condenado por un delito continuado de falsedad en documento mercantil en concurso con otro delito continuado de apropiación indebida por extraer dinero de la cuenta de uno de sus clientes cuando era director de una sucursal del Banco Santander.

Además de director, Domingo era el único "trabajador" de la oficina situada en Esguevillas de Esgueva, un pequeño municipio de
Fachadolid de unos 300 habitantes, donde trabajó durante 11 años y hasta mayo de 2003, según relata la sentencia. Desde ese puesto, emitió y rellenó recibos de disposición de fondos, imitando la firma de uno de sus clientes, para llevarse parte de sus fondos. Así lo hizo hasta en tres ocasiones, que sumaron casi cuatro millones de pesetas. Además, engañó a un par de vecinos para, en una de sus transacciones, conseguir sacar de esa cuenta otras 1.370.000 pesetas. Un asqueroso defensor de la propiedad privada como podéis comprobar, sobre todo de la suya, porque la de los demás es pública según su parecer.

Así, en total extrajo unos cinco millones de pesetas de entonces, unos 30.000 euros, que ahora deberá devolver con intereses a la familia de su cliente, que denunció estos hechos en 2005, un año después del fallecimiento del titular de la cuenta. Valiente parásito caníbal, robarle a un moribundo, pero no importa, los cuervos de la curia lo salvarán como ya hicieron con los criminales requetés.


Además, la sentencia dictó una pena para él de dos años, cuatro meses y 15 días de cárcel, además de inhabilitación para el empleo en la banca durante el tiempo de la condena. Gracias al indulto, queda reducida a dos años y, si el juez responsable lo decide así, podrá eludir la cárcel. Como manda la tradición de la cofradía, participará en la procesión del Jueves Santo, si es que Satán los  cría....

Este puerco fue condenado hace menos de un año, el 16 de mayo de 2013, en sentencia del Tribunal Supremo, que rechazó su recurso. Esta velocidad en la concesión de la medida de gracia no es habitual, ya que la media de tiempo entre condena e indulto es de 2,71 años, como demuestra El Indultómetro (ver). Antes de acudir al Supremo y después de ser condenado en un juzgado de primera instancia de Fachadolid, había recurrido ante la Audiencia Provincial de Fachadolid, también sin éxito.



 21 indultos a las cofradías

Este es uno de los 19 indultos concedidos a las cofradías el pasado 4 de abril. En 2013 este tipo especial de indulto sumó 21 perdones y en 2012 fueron 16. A Domingo se suman este año 11 condenados por delitos contra la salud pública, tres por tráfico de drogas, uno por falsificación de moneda, otro por falso testimonio, otro por los delitos de falsedad en documento oficial, apropiación indebida e intrusismo y uno más por lesiones. Este último se concedió en cumplimiento del privilegio otorgado por el rey Carlos III a la Cofradía de Nuestro Padre Jesús el Rico de Málaga.

En ese mismo Consejo de Ministros el Gobierno concedió otros dos perdones, estos sin relación alguna con la Semana Santa, a condenados por delitos contra la salud pública. A todos ellos se sumarán, cuando lleguen al BOE, otros dos indultos concedidos en el Consejo de Ministros de este mismo viernes también a las cofradías, con lo que la cifra de perdones religiosos de este año asciende a 21.

En total, 2014 acumula ya 6o indultos publicados en el boletín oficial. El ejecutivo de Rajoy, por su parte, lleva en su cuenta particular 798 medidas de gracia desde que llegó al poder.


Fuente:
http://www.huffingtonpost.es/2014/04/12/indultados-semana-santa-_n_5137626.HTML