Parece ser que este puñetero país carece de memoria y por lo tanto de dignidad, el pacto de silencio firmado bajo la amenaza de alzamiento militar llamado transición se ocupó bien de ello. Todos los asesinos, torturadores, ladrones e hijos de puta del antiguo régimen ganaron la guerra por segunda vez y encima sus hijos heredaron el poder a manos de sus padres fascistas, todo quedó atado y bien atado, como diría el Cabronsísimo. La pantomina sería representada por el rey impuesto a dedo por el dictador como protagonista indiscutible, el segundo prota, el primer presidente "votado democráticamente", Suárez, era nada menos que el secretario general del Movimiento y los politicuchos de los partidos serían el elenco de secundarios y artistas invitados, todos ellos a las órdenes del rey crápula que usurpó el trono de su padre, otro crápula de antología.
Aunque se podría haber hecho mucho más en favor del pueblo tampoco se debe ser demasiado crítico con los españoles de entonces, el miedo era algo palpable y cotidiano, los gerifaltes del régimen no veían claro qué saldrían ellos ganando tras el cambio y se resistían a la mas mínima posibilidad de retroceder en sus derechos adquiridos o mas bien impuestos por la fuerza de las armas y nunca por el poder de la razón.
La amenaza de los recalcitrantes se expresaba de todas las maneras posibles, asesinando a abogados laboralistas, activistas políticos de izquierdas y a todo el que se atreviera a toserles, estos dementes saben muy bien como inculcar el miedo en los corazones, pero ese miedo es el alimento del odio y hoy día el odio social hacia los hijos de puta que quieren amargarnos la vida está saciado, también por el conocimiento de las cosas.
Aunque se podría haber hecho mucho más en favor del pueblo tampoco se debe ser demasiado crítico con los españoles de entonces, el miedo era algo palpable y cotidiano, los gerifaltes del régimen no veían claro qué saldrían ellos ganando tras el cambio y se resistían a la mas mínima posibilidad de retroceder en sus derechos adquiridos o mas bien impuestos por la fuerza de las armas y nunca por el poder de la razón.
La amenaza de los recalcitrantes se expresaba de todas las maneras posibles, asesinando a abogados laboralistas, activistas políticos de izquierdas y a todo el que se atreviera a toserles, estos dementes saben muy bien como inculcar el miedo en los corazones, pero ese miedo es el alimento del odio y hoy día el odio social hacia los hijos de puta que quieren amargarnos la vida está saciado, también por el conocimiento de las cosas.
Esta gentuza siempre nos ha odiado y siempre será así porque de esta manera educan a sus cachorros, en el odio hacia el que está por debajo de ellos, solamente de esta manera pueden perpetuar sus privilegios, basándose en el odio y la violencia hacia todo aquel que quiera una porción del pastel más grande que la reservada a su posición social o a su destino según dios ha querido.
España es suya, así lo ha sido desde los reyes católicos, la ralea de condes, duques, barones, grandes de España, obispos, terratenientes, altos mandos militares, o reyes han manejado este país a su antojo y reducido a sus compatriotas a la más absoluta esclavitud y a la mayor inopia intelectual posible. Debemos recordar las vidas de nuestros padres y abuelos, esto que ocurre desde hace 500 años también lo han vivido nuestros progenitores, ayer mismo podríamos decir, esa humillación y desprecio diarios hacia nuestros familiares más directos es algo que no debemos ni podemos olvidar nunca, y por supuesto tampoco perdonar. Yo por lo menos ni perdono ni olvido la vida que llevaron mis padres y abuelos gracias a unos hijos de puta que se hicieron dueños de todo a base de asesinatos y torturas con la bendición de los miserables obispos.
España es suya, así lo ha sido desde los reyes católicos, la ralea de condes, duques, barones, grandes de España, obispos, terratenientes, altos mandos militares, o reyes han manejado este país a su antojo y reducido a sus compatriotas a la más absoluta esclavitud y a la mayor inopia intelectual posible. Debemos recordar las vidas de nuestros padres y abuelos, esto que ocurre desde hace 500 años también lo han vivido nuestros progenitores, ayer mismo podríamos decir, esa humillación y desprecio diarios hacia nuestros familiares más directos es algo que no debemos ni podemos olvidar nunca, y por supuesto tampoco perdonar. Yo por lo menos ni perdono ni olvido la vida que llevaron mis padres y abuelos gracias a unos hijos de puta que se hicieron dueños de todo a base de asesinatos y torturas con la bendición de los miserables obispos.
Las semillas del odio |
Mi madre nació en un pueblecito de Badajoz más miserable que las ratas, pero habitado por personas honradas y trabajadoras, esta región fue especialmente castigada por los fascistas debido a su alta militancia socialista y libertaria. Ella no pudo nunca aprender a leer porque tuvo que ponerse a currar como una mula a la tierna edad de 8 añitos, acarreando agua desde la fuente (puesto que por entonces no existía el agua corriente en las casas del pueblo) hacia las casas de los señoritos que ganaron la guerra. Mi abuela se deslomaba trabajando en lo que quisieran darle los dueños del pueblo y mi abuelo tres cuartos de los mismo, aun así, trabajando de sol a sol, no tenían ni para comer decentemente, se les negaba incluso la más elemental de las necesidas humanas, el alimento equilibrado, rico en vitaminas.
Está comprobado científicamente que una persona víctima de la desnutrición en su infancia nunca llega a desarrollar sus facultades mentales y físicas al mismo nivel que otra bien alimentada desde su nacimiento, con esto no quiero decir que al ser mayores se conviertan en dementes, simplemente que el cerebro, como otros órganos, necesita una serie de alimentos, sobre todo en la infancia, para poder desarrollarse plenamente y con todas sus facultades. Esta era una de las tantas razones sádicas por las que sometían al pueblo constantemente a el miedo paralizante, la ignorancia y el hambre, su intención era denigrar al ciudadano de a pie hasta el nivel de animal de carga, para ello usaban el miedo constante, la más absoluta de las inculturas y por supuesto la desnutrición constante, las personas honradas y pobres no eran tratadas como seres humanos, no eran españoles, los españoles eran los ricos y los afines al nuevo régimen basado en el asesinato, la intolerancia y la ignorancia. Por eso muchos españoles sienten grima cuando se enarbola una bandera española bicolor, por eso muchos españoles se mean en España como concepto de país al que todos pertenecemos, porque España sigue siendo de los mismos y nosotros solamente somos españoles para pagar impuestos y ver como los políticos venden al capital internacional ese país que supuestamente también es nuestro.
Mis abuelos tuvieron que huir de la miseria y el hambre impuestos por los nuevos dueños fascistas que ganaron la guerra, exáctamente como si vivieran en un país invadido por otra nación, estos autodenominados cruzados del cristinianismo y guardianes de los valores españoles eran la peor legión satánica nunca antes padecida por las personas decentes que habitan la península. Por donde pasaban arrasaban, tenían órdenes de acabar con un mínimo del 10% de los habitantes de cada pueblo para sembrar el miedo, estos demonios se saciaron con la sangre de trabajadores cuyo único delito era el exigir que los dejaran vivir en paz, su deforme religión no les impidió comportarse como demonios sedientos de sangre, al contrario, eran los cuervos de la iglesia los que les perdonaban todos los pecados para que no tuvieran remordimientos a la hora de saquear, asesinar o violar a sus compatriotas.
La orgía de sangre en Badajoz fue algo que nunca debería olvidarse, se dice que por las puertas de la plaza de toros rezumaba la sangre de los fusilados en ella, a pesar del poder absorvente del albero. Se emplearon a fondo, no querían que nadie chistara durante muchos años, y lo consiguieron, eso sí, al precio de rebajarse al nivel de alimañas que solamente merecen una muerte lenta y muy dolorosa, como la de su puto Jesucristo.
Como ya he dicho, todo esto ocurrió ayer mismo, no estamos hablando de batallitas del abuelo cebolleta, esta herida todavía no ha cicratizado puesto que nunca nadie se ocupó de curarla debidamente, aquí nadie ha sido juzgado por crímenes contra la humanidad, asesinatos sin ningún sentido mas que el de imponer la explotación del hombre por el hombre. Los cachorros de toda esta gentuza viven hoy día mucho mejor de lo que jamás soñarían sus papás asesinos, ellos son los que tenían a su alcance el acceso a la universidad, por lo tanto los cargos importantes siempre han sido copados por las mismas familias, los "grandes" abogados, arquitectos, médicos, periodistas y altos cargos políticos ostentan los apellidos de los asesinos de su propio pueblo hasta nuestros días.
Los padres de todos los políticos de partido actuales eran todos de este tipo de calaña, podéis estar más que seguros de que ninguno de ellos pertenece a la auténtica clase obrera a la que dicen representar algunos, si fuese así raramente habrían tenido acceso a la universidad y por lo visto en este país para ser político es requisito casi indispensable ser picapleitos, economista o tener la carrera de empresariales, cuando lo mejor sería tener el certificado de honradez y vocación de servicio hacia sus vecinos.
Estos fascistas que nos gobiernan son los auténticos terroristas, incluso son todavía mas bajos que los de Al-Qaeda, porque por lo menos los fundamentalistas árabes fundamentan sus ideas extremistas en valores que favorezcan a su pueblo en contra de los buitres occidentales, pero estos fascistas carecen de principios morales y cualquier atisbo de humanidad, su lucha es contra su propio pueblo y encima se visten con la bandera a la que escupen. No se puede caer más bajo, no son personas, son parásitos caníbales a extinguir, nada bueno se puede esperar de ellos, incluso cuando sonríen, o más bien, aún menos cuando sonríen, como es el caso del mequetrefe Montoro o el robapiedras de Wert.
Están que se salen, el país vuelve ha estar en sus manos y con la venia de la supuesta mayoría de los votantes, no necesitan el voto de otros partidos para ejecutar sus decretos, sus ministros sobradamente incompetentes son ministros precisamente por esa imcompetencia, porque anteponen el placer de haber llegado a ministros a cualquier valor moral, están eufóricos porque estos seres insignificantes que nunca habrían llegado a nada si no se hubieran dedicado a la política, ahora son los reyes del mambo, Rajoy ha sabido más que bien escoger a su cuadrilla de secuaces, ninguno debe ser mas inteligente que él, y ahora que padecemos la inteligencia de Rajoy...
Están que se salen, el país vuelve ha estar en sus manos y con la venia de la supuesta mayoría de los votantes, no necesitan el voto de otros partidos para ejecutar sus decretos, sus ministros sobradamente incompetentes son ministros precisamente por esa imcompetencia, porque anteponen el placer de haber llegado a ministros a cualquier valor moral, están eufóricos porque estos seres insignificantes que nunca habrían llegado a nada si no se hubieran dedicado a la política, ahora son los reyes del mambo, Rajoy ha sabido más que bien escoger a su cuadrilla de secuaces, ninguno debe ser mas inteligente que él, y ahora que padecemos la inteligencia de Rajoy...
Los derechos conquistados por los trabajadores durante los últimos 50 años a nivel planetario se están perdiendo de una manera rápida y posiblemente irreversible, no podemos esperar a los hechos consumados para actuar en defensa del futuro reservado a nuestros pequeños. Las huelgas generales y manifestaciones deberían ser constantes y masivas desde hace mucho tiempo, sin embargo nos encontramos con una población adormecida que prefiere esperar verlas venir y encima miran con recelo ignorante a los que se manifiestan por el bien de todos, incluso por el de ellos aunque no lo merezcan.
Lo desconocido suele dar miedo y en un país de ignorantes voluntarios sus ciudadanos tienen miedo incluso a sus iguales, reciben toda esa mierda que se tragan a diario por la Tv sin capacidad de criterio propio alguno, así que lo que saben lo saben por las noticias del telediario, porque, si lo han dicho por la Tv debe ser cierto, hasta que no despierten de ese limbo televiso no se darán cuenta de que ellos son personas tan respetables y dignas de admiración o mas que cualquier hijo de puta encorbatado y bien afeitado que sale por la Tv vendiéndonos la moto democrática, que su opinión cuenta tanto como la del presidente del gobierno, que no es un trozo de carne moldeable según las circunstancias del mercado y que no existe nadie mejor que él para intentar solucionar los problemas que le acucian en el día a día.
Ahora este gobierno se siente aun más legitimado tras las elecciones gallegas, han arrasado de nuevo en la tierra de Paca la culona y Fraga P. Pótamo, su feudo de adhesiones inquebrantables forjado durante 40 años de terrorismo estatal. Tras la resaca del éxito electoral no muestran ningún pudor a la hora de sacar pecho, la Fatiga Báñez dice que estamos en el camino correcto, que se empiezan a ver síntomas de recuperación, los autónomos cotizantes a la SS han aumentado su número, parece ser que se han incrementado los maliciosamente llamados emprendedores, hay que ser un demente peligroso para decir que estamos saliendo de la crisis cuando casi tenemos seis millones de parados, 500 deshaucios al día y 3.500 suicidios al año.
Por lo visto en este país cualquier mediocre puede llegar a ministro, solamente se necesitan pocas luces, capacidad de mentir sin pestañear, adoctrinamiento fascista y falta absoluta de principios morales, estas son las cualidades que pusieron en su currículum los candidatos del gobierno más franquista desde que el asqueroso dictador se fue al infierno.
Fijémonos por ejemplo en el puerco de Montoro, es el típico ser insignificante, lleno de complejos debido a su desagradable aspecto potenciado por sus formas arrogantes, seguro que era el hazmerreír del colegio, el blanco de todas las collejas, pero ahora, una vez nombrado ministro, ese por el que no daban ni un duro ni siquiera en su propia casa, se transforma en un ser henchido de prepotencia y dispuesto a jodernos en pago de su infancia plagada de merecidas humillaciones.
Esta rata dicta con una sonrisa sádica en sus hocicos las leyes que nos putearán a todos y no dice lo de que se jodan en público porque tiene menos cojones que la zorra pepera que sí lo dijo, si es que ha estos guarros solamente hay que dejarles hablar para que ellos mismos se descalifiquen y retraten. Si alguien se atreve a cuestionar sus políticas enseguida son defenestrados de la manera más rastrera posible, siendo calificados como radicales de ultraizquierda o antisistema automáticamente, cuando no amenazando al más puro estilo mafioso.
Ellos son la legitimidad del pueblo según parece, aunque gobiernen en contra del mismo, ya nos metieron en una guerra absolutamente injusta y por lo tanto repugnante para cualquier persona de bien, pero los españolitos han vuelto a darles esa mayoría absoluta que necesitaban encarecidamente para poder hacer y deshacer a su antojo, así que ahora nos jodemos, ¿no somos demócratas?, ¡eah!, pues a joderse no vaya a ser que te acusen de antisistema y según se están poniendo las cosas podrías ir al trullo por ello, me cago en dios y en el muñeco de la puta virgen del Rocío.
La población siente mas miedo hacia la anarquía que ha este fascismo impuesto y disfrazado de democracia, ya se han ocupado bien los fascistas de mostrar a la anarquía como sinónimo de caos y destrucción, porque saben que los anarquistas no se contentan con medias tintas o arreglos chapuceros. Desde el anarquismo se proclama la desaparición de cualquier forma de estado y con ello se eliminan todos los privilegios o derechos adquiridos por medio del latrocinio o la fuerza, devolviendo al pueblo lo que es suyo por derecho natural.
La desaparición de los militares, policías y las cárceles, ya que éstos no tendrían razón de existir en un mundo que asegurase las necesidades de todos y nadie acaparara la riqueza propiedad de todos para fortalecer su posición y así poder esclavizar a sus semejantes, al no existir especuladores, explotadores o grandes fortunas basadas siempre en el robo, los policías y militares ya no tendrían a quien defender y al no faltarles de nada a nadie la delincuencia solamente sería una anécdota esporádica. Los reyes tendrían que trabajar como cualquier ciudadano, no sería necesario matarlos como ellos harían contra los que intenten despojarlos de sus privilegios ganados por la puta gracia de dios, nosotros no somos asesinos como ellos. Nadie estaría por encima de nadie, entonces sí podríamos realmente decir que todos somos compatriotas o paisanos, cuando todos trabajáramos y comierámos igual, cuando todos remásemos en la misma dirección, la del bien común y la paz social real y duradera.
No nos podemos permitir el lujo de esperar ha que termine esta legislatura y en las próximas elecciones vuelva ganar el PSOE, el gobierno actual debe caer a fuerza de presión en las calles y todos los sitios posibles y una vez caiga la abstención debería ser generalizada. Si el PSOE vuelve a gobernar España estaremos otra vez en el mismo callejón sin salida, los sociatas ya han probado su servidumbre hacia los que realmente mandan modificando la constitución para que primero cobren los bancos y después coman los ciudadanos, los partidos minoritarios sin ninguna posibilidad de influencia en las cosas de comer solamente sirven para restar adhesiones a la abstención, la única papeleta que sirve a tus intereses en unas elecciones es la que nunca llega a entrar en la urna, antes de votar piensa primero si a quien votas es realmente quien dice ser o simplemente un embaucador profesional siempre dispuesto abusar de las buenas intenciones del ciudadano honrado.
Ninguno de ellos es un trabajador como tú, sus intereses no son los tuyos, si hubiese alguno honrado seguro que nunca llegará a nada porque será apartado del partido, en los partidos políticos solamente medran los dispuestos a todo, los sin conciencia, los trepas profesionales. La abstención es nuestra mejor arma contra este sistema podrido, de una forma pacífica y ordenada, con fundamentos basados en la razón y el sentido común, sin necesidad de recurrir a la violencia aunque ha estas alturas ya esté mas que legitimada, sin abstención no existe solución.
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