Ciutadans ¿comodín contra el posible fin del bipartidismo?

Solamente nos importa tu voto, confía en nosotros inconsciente

Este niñato sabihondo llamado Albert Rivera se ha propuesto medrar en política como sea, diciendo lo que los electores quieren escuchar, administrando muy bien los tiempos y las formas, haciendo ver que él no es un político, sino un ciudadano más. Podríamos encontrarnos ante el José Antonio el Primo de la Rivera del S. XXI, un nuevo señorito con capacidad para engañar al obrero ingenuo y contentar las criminales apetencias del fascio español, un político comodín, que sepa "adaptarse a los tiempos que corren" y cuyos principios morales sólo sean fachada, (un facha vamos) un político de esos que tanto gusta el Estado español y en el que los españolitos de a pie delegarían sus vidas con tal de no ser dueños de ella. <<Siempre es más fácil obedecer que pensar y este chaval parece buena gente>>, se dice a sí mismo el paisano español acostumbrado a que otros decidan por él como debe ser su vida. 

No son pocos los trabajadores embaucados por este regalador de oídos profesional, su mensaje ridículamente apolítico, al igual que el de Rosa Díez, está calando en el ingenuo electorado español (el mismo que encumbró a Aznar o a Rajoy). Esta es la respuesta del Estado al posible fin del bipartidismo, crear o fomentar la ascensión de grupos minoritarios afines al régimen para que complementen la falta de votos del PPSOE y así poder gobernar en "mayoría absoluta" pase lo que pase. En última instancia también podrían recurrir al asqueroso "gobierno de concentración", en el cual se dejarían de zarandajas y mostrarían el verdadero rostro de la mafiocracia, el del PPSOE. Los sociatas alemanes ya hacen guiños a la Merkel, incluso tienen la poca verguenza de argumentar que estando ellos en el gobierno, éste sería más "social", valiente piara de indecentes.

Vaya pinta facha que tiene el tipejo este

Es curioso que esta misma reacción ante la posible caída del bipartidismo no se de desde la izquierda, y por supuesto que no me refiero a los comunistas juancarlistas de IU ni a los Nazional Socialistas del PSOE, cuyas férreas disciplinas de partido impiden cualquier cisma o debate interno, la cúpula es incuestionable e infalible y point.

En nuestro país no existe ningún partido realmente de izquierdas que se atreva a poner en su programa la negación del pago de la estafa-deuda o la salida del euro y la CE, principales fuentes de nuestra actual desgracia. Aquí como mucho tenemos al Valderas y su ridículo e incumplido "contrato social" que no sirve ni para papel higiénico, su  "rebeldía" se transformó rápidamente en "imperativo legal" nada más convertirse en "hombre de Estado".

La derecha va ganando por goleada, y no solamente porque haya ganado las elecciones holgadamente, sino porque también ha conquistado las mentes del españolito medio, todo ello gracias a la impostura de la autodenominada "izquierda española", o sea IU y PSOE junto a sus sindicatos de partido, nunca de clase. La crisis económica es el fruto podrido de la crisis moral que padece de manera crónica la izquierda española. PSOE e IU son los que han allanado el camino al fascio español a través de su impostura. La ignorancia supina de un electorado manipulado hasta la saciedad es el otro complemento  perfecto para que sigan gobernando los de siempre, los que masacraron a sus propios vecinos con saña sádica para conservar sus privilegios, que como tristemente podemos constatar en primera persona, conservaron y conservan muy bien.

Como suele pasarme mucha veces, esta entrada era para hablar de Albert Rivera y al final he terminado enrrollándome, retomemos la inicial intención de esta entrada para conocer un poco más a este salvapatrias venido a menos. Resulta que el chaval ya intentó medrar en política anteriormente, ¿os imagináis en qué partido? pues sí malpensados, nada menos que en el PP, ese partido que según él es tan corrupto e incapaz de defender la integridad nazional, veamos:

El presidente de Ciutadans (C's), Albert Rivera , estuvo afiliado al Partido Popular hasta el mes de abril de 2006, cuando envió una carta para pedir la baja, según informa hoy 'El Periódico de Catalunya'. Rivera ingresó en Nuevas Generaciones, la rama juvenil del PP, en septiembre de 2002. Concretamente, Rivera estuvo afiliado al PP tres años y siete meses, del 10 de septiembre de 2002 hasta el 7 de abril de 2006, según la documentación proporcionada por el Partit Popular de Catalunya (PPC) a la Agencia Efe.

Curioso, se afilió al PP cuando Aznar y el PP ostentaban la infame "mayoría absoluta" en la que Ánsar (el ganso) desempolvó su vieja camisa azul. Buen momento este para medrar en política militando en un partido con "mayoría absoluta" y el cual tenía muchas posibilidades de ganar las próximas elecciones, pero las expectativas del PP quedaron truncadas tras los atentados del 11-M como todos conocemos, y con ellas también las de Albertito, ya no militaba en un partido ganador en el que medrar rápidamente.

Al destaparse la antigua filiación política de Albert Rivera, Ciutadans se apresuró en dar su versión (parece que a Albertito no le gustaba mucho su propio pasado). Fuentes de Ciutadans explicaron a Efe que Rivera sólo firmó un documento para "pedir información" sobre el PP, momento a partir del cual, según la versión de C's, el PP lo declara "simpatizante" del partido y le envía información puntualmente. Albert Rivera estuvo afiliado tres años y siete meses al PP pero Ciutadans dice que sólo pidio información, ¿quién miente? Años más tarde, el líder de Ciutadans, envió dos burofaxes al PP para que dejaran de enviarle información y para solicitar que le "dieran de baja de la base de datos" de este partido, según la versión de C's.

Otro que se estampará
contra el
"imperativo legal"

Por su parte, el PP de Cataluña contradice esta versión y asegura que Rivera "era consciente de lo que iba a hacer", puesto que en la hoja de afiliación aparece su firma bajo las frase "firma del afiliado", avalada esta por dos personas. En esa hoja dos miembros de las juventudes populares avalan con su firma el ingreso de Albert Rivera, que aporta sus datos personales por escrito. Al PP no le consta que Rivera llegara a pagar la cuota de 30 euros a Nuevas Generaciones aunque sí confirma su baja el 7 de abril de 2006.

Rivera ha omitido esta afiliación en su currículum y todas las entrevistas. El presidente de Ciutadans ingresó en el PP en junio de 2002 a través de la agrupación del PP en el distrito de Sant Martí. Según Rivera, sólo acudió a la sede del PP a pedir información y "no pagó ninguna cuota ni llegó a tener el carné" del PP. Los miembros de Nuevas Generaciones no suelen pagar cuota en el distrito de Sant Martí y Rivera nunca acudió a buscar el carné. Rivera envió una carta para pedir la baja el pasado abril, 10 meses después de acudir a la presentación del manifiesto de intelectuales en el Centre de Cultura Contemporània de Barcelona el 21 de junio de 2005, cuando se creó Ciutadans.

Puede que yo sea un mal pensado, es  probable, pero esto huele muy mal, más bien apesta del copón. Resulta que se afilia al PP cuando éste se encuentra en su mejor momento, gobernando con mayoría absoluta y con grandes expectativas de seguir gobernando, un joven ambicioso, inteligente (al César lo que es del César) y bien parecido como él, tiene grandes posibilidades apostando al caballo ganador. Al final esas expectativas se quedaron en nada tras la estrepitosa caída del PP, aún así siguió militando en el PP, o al menos así consta en los archivos del PP del distrito de Sant Martí, lo hizo incluso después de crear Ciutadans, no pidió la baja de militancia en el PP hasta diez meses después. ¿Acaso se reservaba un As en la manga por si el experimento de Ciutadans salía rana? Al final Ciutadans le ha convertido en un político conocido por todos e incluso bien valorado por la clase media y parte de los trabajadores. Sus desconocidos padrinos hacen todo lo posible para que aparezca en los medios de comunicación costantemente, ya se ha convertido en un tertuliano habitual de Interlobotomía (arañando así algunos votos a la derechona también) o los debates de La Secta y Telecirco. Como él mismo dice "en Ciutadans cabemos todos los ciudadanos españoles" claro que sí, sobre todo los "españoles", y si se llaman Manolo miel sobre hojuelas.

Curiosa propaganda, todos en pelotas pero él con traje...

Es curioso que teniendo un escaso número de votos su aparición en los medios sea constante, mucho más que otros líderes políticos con mayor apoyo electoral, ¿quiénes se encuentran tras este nuevo partido llamado Ciutadans que aspira a llamarse Ciudadanos y conquistar todo el ámbito estatal con su berborrea de vendedor de elixires curalotodo caducados?