El aborto es un derecho indiscutible. Las mujeres no son conejas del Opus




Ayer se perpetró uno de los mayores atentados contra la libertad y por parte de nuestros "papás políticos" desde la miserable existencia de la mafiocracia. Ayer fue un día de luto para nuestra libertad y paz social. Ayer se le negó el derecho de propiedad de sus cuerpos - la única propiedad moral - a todas las mujeres de nuestra tierra, o lo que viene a ser lo mismo, a la mitad de la población de nuestro país. Para colmo de la indecencia y podredumbre moral católica, Fachardón dice que esta ley ha sido creada para proteger la maternidad, ¿y quién protege a las mujeres que no quieren traer más esclavos a este mundo para ser explotados por la ralea fascista que nos dicta?

Gruñe el puerco este del Fachardón que él sí traería al mundo a un niño deforme y condenado al sufrimiento perpetuo nada más nacer, que él lo haría por convicciones morales. Otro escupitajo más a todos los paisanos españoles, y en pleno rostro. Vamos, que nos viene a ladrar que somos todos unos inmorales por siquiera pensar en el aborto. Este ser de mente deformada por el ultracatolicismo pretende darnos lecciones de moral, este miserable que ha impuesto las tasas en los juicios para que sólo los ricos difruten de la "justicia", resulta que es un adalid de la moral, cuando sólo es un reprimido que le daba por culo a su mujer para que ésta llegara virgen al matrimonio.

Esto no es sólo cosa de mujeres ni muchísimo menos, esto es una guerra abierta contra la libertad de todos los ciudadanos decentes de este país, quien impone por cojones sabe que se arriesga a que esa imposición se vuelva en su contra, si la chusma ultracatólica continua con sus agresiones a nuestras libertades, esta vez no les dará tiempo a los curas ni de subirse a los campanarios para disparar a trabajadores desarmados, los vamos a capar a todos. Ya que son tan célibes, que se hagan eunucos y así no podrán abusar más de niños indefensos, de ninguna de las maneras vamos a permitir el resurgimiento del nazional ultracatolicismo, otra vez no.

Ni siquiera Marine Le Pen (Marine La Pene), la quinta esencia del fascismo europeo, estaría de acuerdo con semejante aberración en forma de ley, si es que cuando se trata de retrógrados y miserables son peores que el Papa. Encima exigen que se les trate con respeto debido, hagan lo hagan, pero solamente encontrarán odio en la mirada de sus víctimas. ¿Os acordáis del respeto a la autoridad franquista?, pues volvemos a lo mismo, a los criminales que atentan a diario contra todos nosotros debemos tratarlos como a personas respetables, en lugar de como a delincuentes - lo que son - sin ningún atisbo de humanidad.

¿Qué se ha creído el populacho?, si nosotros decimos que aquí no se aborta, pues todos a callar y a tener hijos como los "buenos cristianos" del Opus, que carajo, y como medida profiláctica se acabaron las minifaldas esas que enardecen la natural virilidad de cualquier español de verdad. Nada de condones, postura del misionero y a follar sólo para procrear, peor lo tuvo la virgen y nunca se quejó, que engendró sin fornicar ni nada, apóstatas cegados por el vicio. Pero eso sí, como dijo el maestro "dejad que los niños se acerquen a mí", y bien pegaditos.

Si la chusma ultracatólica de este país se niega a respetar la libertad de quienes no estén contaminados por la doctrina vaticana (dictada por Satán), aquí se va a liar la gorda, y bien gorda. Ya estamos hasta los cojones de aguantar a esta basura intolerante que se cree en posesión de la verdad divina y que tilda a los ateos de descarriados sin principios morales, ya está bien ostias. Al que no respete a los homosexuales, palo por el culo hasta la garganta. Al que nos diga inmorales, foto del sábado en la puerta del puti club. Al que quiera imponer la gestación, una buena dosis de radiación para que sus hijos nazcan con tres brazos; o mejor, con dos bocas para que pidan más pan, porque ahi que ver como tragan los pequeñajos, son una ruina oigan... Al que quiera poner crucifijos en las áulas, le practicamos una lobotomía con él a ver si se cura, aunque sin muchas esperanzas, la verdad. Quien no respeta no merece ser respetado, quien impone sólo puede esperar contestación, quien busca el enfrentamiento no puede quejarse de haber recibido el primer golpe, quien juzga sin fundamento será juzgado sin remordimiento. ¡¡¡No queremos curas en los ovarios de nuestras compañeras y los echaremos de ahí con la autoridad moral que nos da la razón!!!

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