Catalunya Vs. Ejpaña: Refinados burgueses sanguijuelas Vs. Fachas redomados sin filtro

Para empezar, nunca he tenido la soberbia como para decirle a nadie si debe sentirse catalán, español o de Villadiego, cosa que por otra parte me importa menos que la meteorología de Australia. Que cada cual sienta lo que le plazca mientras no quiera imponerme a mí su manera de proceder o pretender venderme credos sectarios. Por lo tanto, si en Catalunya existe una mayoría independentista y así lo muestran en un referéndum sus habitantes, pues que se haga el referéndum y se proclame la República Catalana. 

Para continuar, una vez explicado el primer punto, vayamos a lo del estúpido y paleto sentido patrio. Yo no me siento español, andaluz o lo que sea. Sí, he nacido en una región del continente europeo englobada en eso que llaman España, que para nada es un conjunto homogéneo, más bien todo lo contrario. ¿Que se quiere la tierra donde uno nace y da sus primeros pasos? Claro, eso es evidente, son los lugares y rincones en los que jugabas cuando pequeño, donde se tienen las primeras experiencias de la vida en distintos ámbitos. Eso marca de por vida, puesto que todos esos sitios donde se han vivido alegrías, incluso tristezas, asemejan un lienzo en el que está dibujado el pasar de nuestros años. Pero de ahí a fomentar lo propio como algo divino, superior; es la manera en las que se han creado todas las naciones. Esta estupidez patria siempre llevó a que esas primeras micro-naciones terminaran enfrentándose entre sí para así crear otras naciones más grandes. Cuando una de estas grandes naciones se situaba en franca ventaja sobre las restantes, el Superestado terminaba fagocitando poco a poco esas micronaciones que nada pueden hacer contra el gigante que ellos mismos nutrieron mostrando la misma iniquidad siendo aun cachorro y frágil. Y resulta que este gigante Estado Español, aparentemente indivisible por mor de supuesto mandato divino, pero fuertemente defendido por la reacción para que así se mantenga el nudo que todo lo dejó bien atado, ha enfrentado a los pueblos de Iberia en lugar de hermanarlos. 

El garante para que ese nudo no se afloje es el Borbón de turno, y por ello es el jefe de los tres ejércitos españoles que nunca hicieron nada bueno por nuestro pueblo. No son defensores de supuestos invasores, son represores de el "enemigo interior", de tod@s l@s español@s que viven de su trabajo y no están dispuestos a permitir un renacimiento del franquismo criminal y asesino, carente de toda humanidad. 

A ese gigante Estado Español dio la gobernabilidad a Aznar en su primera legislatura el nacionalismo catalán, y también apoyaron al PSOE de Zapatero cuando lo necesitó. De esta manera, los del Torra y ERC son quienes creyeron sacar réditos negociando con los de Madrid, con el PPSOE, las dos columnas básicas del régimen borbónico al que ahora tildan de saqueadores de Catalunya. A los hipócritas se les caza con mucha más facilidad que a los cojos. Años y años intentando rebañar lo máximo para vuestra "comunidad histórica" a cambio de apoyar a tirios y troyanos, mostrando a la par vuestra verdadera razón de ser, la pela -para los mandarines-, en ningún caso la verdadera justicia social para el pueblo, para la supuesta nación, que decís representar.

Y para terminar esta breve exposición de cual es mi opinión en rasgos generales acerca de lo que acontece ahora en España y Catalunya, lo que ha perpetrado el Estado español contra el gobierno de Catalunya es un acto declaradamente fascista. Nunca debieron entrar en prisión los presos políticos, mucho menos se puede permitir que quieran encerrarlos durante 30 años, tirando la llave tras cerrar la celda, sin posibilidad alguna de arreglar el atentado ya perpetrado, sin puerta abierta alguna al indulto que enmendaría semejante acto de terrorismo estatal, indultos que tan generosamente otorgan a ladrones probados los del PP o incluso los del PSOE. 

Los C´s dicen que si de ellos dependiese l@s encerraban a tod@s y tiraban la llave al fondo del mar a la altura de la Fosa de las Marianas. ¿Qué pretenden con esa miserable aptitud? ¿fomentar el enfrentamiento que no deje lugar a ningún tipo de entendimiento? Una vez más, l@s políticos de todo color muestran su verdadera inutilidad en cuanto a convivencia justa y pacífica se trata.

Vamos a ver: se les subió por un momento a la cabeza el cava que bebían mientras daban por proclamada la República, lloraron de alegría y tal, sin violencia de ningún tipo, y lo que es más ilustrativo, sin que nadie de los que celebraban la proclamación creyeran en lo más mínimo que esto fuese así, que ya eran "independientes". Pero la reacción ejpañola no admite matices ni bromas de ningún tipo cuando se pone en cuestión el honor patrio, cosa que no se muy bien que es, aunque me imagino su rancio olor.

Han metido en la cárcel a todo un gobierno elegido en las mismas urnas a las que acuden los carceleros. Ahora pretenden encerrarles 30 años y negarles cualquier posibilidad de indulto. Todo ello por proclamar una república durante unos segundos. La reacción española no conoció la ilustración y en nuestros días solamente lee el Marca. La burguesía catalana muestra su estupidez creyendo que trataban con antiguos socios del latrocinio institucionalizado en todas las regiones de eso que llaman España.

Dicho todo esto, no comparto de ninguna de las maneras esa idea de que Catalunya vivirá mejor siendo una república independiente, otro país más. Yo creo que vivirán mucho peor quienes a mi me importan, l@s de abajo. Quizás vivan mejor l@s polític@s y empresarios, pero no quienes viven de su trabajo y que al mes de quedarse parad@s no les llega ni para comer...

Bueno, creo que mi postura ha quedado meridianamente clara, excepto para quienes tienen dificultad para entender la letra escrita o demasiado fanatismo como para aceptar cualquier idea que no coincida absolutamente con sus postulados. 

Ahora, como no podría ser menos, viene la parte explicativa en la que se exponen las causas de mi pensamiento. La hierba no crece sin tierra y el pensamiento crítico no se nutre del aire o de los telediarios. Las razones necesitan de una explicación alimentada por la materia gris, no envenenada por la bilis que fomenta el sectarismo partidista que da de comer a quienes la fomentan y en el mejor de los casos pan duro a quienes creen en el maná político, ya sobradamente probado como falso a ojos vista, además de incomestible.

Cada región de la península ibérica tiene su propia idiosincrasia, eso es lo que hace de esta tierra un crisol de culturas, un valor que está en decadencia, pero no por ello menos valioso. Catalunya -junto al País Vasco- siempre fue y es la parte más avanzada social y culturalmente de toda España, quienes se preocupan por conocer la realidad de su tierra saben a ciencia cierta este dato. Pero, ¿es eso excusa para defenestrar a quienes vivimos en esta parte del planeta Tierra por mor del azar cósmico? ¿ese mismo azar ha hecho a los nacionalistas seres superiores al resto de quienes hemos nacido al lado de su tierra? 

El nacionalismo es siempre exclusivo, el internacionalismo inclusivo, así es, así fue y así siempre será. L@s español@s que lloran escuchando los graznidos de la Marta Sánchez son tan nacionalistas y obtusos como quienes ridículamente dicen representar a toda la población de Catalunya o del País Vasco. 

Yo no soy nadie -ni nunca pretenderé serlo- para representar a nada más que a mí mismo, una cosa es que sea afín al anarquismo y otra muy diferente que hable por boca de ell@s, pero en la alcantarilla de vanidades y diarreas cerebrales que es Twitter abundan las cuentas que se dicen anarquistas y defensoras sin matices, cuando no colaboradoras, del independentismo catalán vasco, o gallego. Además, semejante demencia llega también hasta la comunidad valenciana, o incluso Andalucía. 

No se habla de federalismo, de hermandad entre todos los pueblos de Iberia, no, se promueve el asqueroso nacionalismo, igual de repugnante sea azul que teñido de rojo. Claro que la Idea, en estos momentos de falsedad absoluta en las relaciones humanas, interés antepuesto a cualquier amistad verdadera y consumismo dementemente compulsivo, tiempo en el que todo está podrido, se cotiza a la baja entre rebuznos twitteros y ninat@s petarder@s. Por eso solamente me caso con Satán, y hasta ahora nunca me defraudó. Como para Bakunin, mi maestro es el Satán nihilista.

Hay que ser imbécil para ser de abajo y dar ni siquiera un mínimo apoyo a Torra, representante de la peor caspa que pueda existir en Catalunya. Un burgués que ayuna entre monjes en nombre de Catalunya. Un meapilas conservador que escupe sobre lo que predica cual obispo. ¿Cómo hemos llegado a semejante grado de estupidez? Los Pujol han saqueado a su "querida" tierra a dos manos, y cuando se destapa el latrocinio responden rebuznando que el resto de los pueblos de Iberia les roba a ell@s. Han sostenido gobiernos del PSOE y del PP mientras que la "conveniencia de Estado" les permitía robar igual que los de Madrid, con la única condición que todas respetaran la Omertá, pero cuando llegó la crisis y el 15-M, cuando ya puede ver todo aquél que tenga ojos que tod@s l@s polític@s sólo buscan su propio bienestar y no el de quienes dicen representar, comenzaron a abrirse los cajones de mierda guardados por todas las sectas políticas bajo llave hasta el momento preciso. Son tan torpes y analfabetos como para cavar su propia tumba. 

¡En todos los partidos hay corruptos! graznan en su descargo los del PPSOE y l@s señor@s polític@s catalan@s, molt honorables tod@s ell@s al parecer. Pues si hay corruptos en todas las sectas polític@s ¿por qué razón deberíamos confiar en ellas?

A nadie que se estime como persona puede agradarle que Junqueras esté encerrado porque unos mafiosos con agravante fascista dicen que es un golpista. Solamente infrahumanos sin capacidad de raciocinio y empatía pueden alegrarse de semejante iniquidad. Él está pagando con creces el error cometido, aunque quienes están en libertad lo tratarían como a un traidor si realmente expresara abiertamente que se equivocó al asociarse con lo peor de la rancia burguesía catalana pretendiendo ser de izquierdas. Con quienes perpetraron los mayores recortes al bienestar común en lo que llevamos ya demasiado tiempo padeciendo esta farsa a la que llaman democracia, y encima autoproclamándose molt honorables. 

La piara familiar apellidada Pujol ha hozado todo lo que ha querido de la caja común, ¿ahora resulta que son quienes velan por el bien de la misma Catalunya a la que ellos escupen con su miserable proceder? ¿Ahora resulta que el engrendo parido por décadas de pujolismo, Mas, es más catalán que el fuet montañés? A nadie engañan ya, y todas las personas de bien y sin secta sabemos que Mas ha sido un verdugo para su pueblo, o al menos para quienes han sufrido sus inmisericordes recortes sociales. 

La suerte que tienen estos nacionalistas es que esas mismas personas de bien y sin secta nunca apoyaremos que ningún Estado pueda encarcelar a nadie por miserable interés fáctico. Su suerte es la que ellos nunca nos desearían a quienes denunciamos su asqueroso modus vivendi a la par que también lo hacemos contra el Estado carcelario y represor español. Así se les atraganten los garbanzos que comen gracias al sudor ajeno, pero yo nunca me rebajaré hasta su misma podredumbre y bajeza humana.

Los españoles de bandera son fachas, y por lo tanto proclives al fascismo, pero quienes anteponen el lugar de nacimiento a la verdadera justicia social ¿qué son?. Pues nacionalistas, otra vertiente del fascio, la misma de la que mamaron los arios supremacistas y los franquistas autodenominados nacionales, la misma iniquidad que de manera soslayada defienden l@s catalanistas. 

El nacionalismo siempre se nutre de la estupidez más supina, la que lleva a creer a un@s mejor que a otr@s por el azaroso hecho de haber nacido en tierra diferente. La misma estupidez que lleva a millones de analfabetos españoles a sentirse mucho españoles, porque tampoco pueden aspirar a mucho más debido a su anemia neuronal hereditaria. Nada bueno puede esperarse cuando se mezclan los sentimientos viscerales con el desprecio absoluto hacia l@s contrari@s que a fin de cuentas somos iguales, igualmente pisoteados por los del taco, ya sean españoles o catalanes. Cataluña perderá con el fanatismo nacionalista y el resto de Iberia también, sabiendo ya tod@s quienes son l@s paganinis de los platos rotos por la autodenominada "clase política".

Esta es mi tierra