Represión fascista en San Juan de Aznalfarache (Sevilla)





En la historia de San Juan de Aznalfarache el 24 de octubre de 1936 es una fecha que se recordará por los infames asesinatos que cometieron los falangistas: bajo el mando de los militares fascistas sediciosos que se mearon en lo que habían jurado con la mano puesta en la para ellos sagrada Biblia y los curas que les perdonaban sus pecados capitales. El mismo 18 de julio comenzó la masacre sobre toda la población indefensa e inocente de Sevilla y su provincia. 


El 24 de octubre de 1936 asesinaron en las tapias del cementerio de San Fernando de Sevilla a cuarenta y tres personas, muchas de ellas aún sin identificar, de  Alcalá del Río, Camas, Coria del Río, El Garrobo, Mairena del Aljarafe, Morón de la Frontera, Sevilla y San Juan de Aznalfarache. Asesinaron cobardemente a 16 personas, 9  de ellas vecinas de San Juan, sin posibilidad alguna de defensa y sin haber cometido ningún tipo de delito más allá de pedir pan y respeto. Todas aceituneras en la fábrica de quien era dueño del pueblo. Y a 7 vecinos, entre las que se encuentran las dos hermanas, Gabina Isabel y Francisca Porro Domínguez, María Arriaza Calero de 22 años, posteriormente le asesinarían a dos de sus hermanos, Diego de 18 años y José de 21 años, o el matrimonio formado por Guadalupe Sánchez López y su marido Antonio Anillo Marín, dejaron solo, abandonado y desamparado a su único hijo de 10 años. Por la fecha de sus asesinatos deben encontrarse en la fosa común del Monumento o Alpargateros, sus cuerpos se encuentran entre las más de 4.500 personas asesinadas por los militares fascistas sublevados que se hallan en las fosas comunes del cementerio San Fernando de Sevilla, unas 2.000 siguen sin identificar.


Hermanos Arriaza Calero



Hasta la fecha están contabilizados un total de 80 asesinatos de sanjuaneras y sanjuaneros por los franquistas, estos crímenes se cometieron en los años 1936, 1937, 1938, y 1941. Entre éstos se encuentran -como ocurrió en todos los municipios del país gobernados por no afectos al medievalismo-  el alcalde y seis concejales de la corporación municipal.


Las terribles consecuencias que para gran parte de la población sanjuanera significó la implantación de un auténtico estado del terror tras la ocupación de las tropas golpistas tuvo como fatal desenlance los asesinatos de 80 vecin@s, cerca de un 2 % de la vecindad de la época. Un siniestro porcentaje que se repite en los actos de exterminios y la implantación del terror “ejemplar” para el sometimiento de las localidades ocupadas. La represión criminal y genocida ocasionaron la mayor masacre ocurrida en San Juan desde el S. XIII, y meses de pánico para muchas familias temerosas de una delación o ser señaladas por vecin@s que colaboraron denunciando o participando directamente en las detenciones y crímenes, que no fueron poc@s. 


Esta cruel matanza inhumana alcanza un mayor grado de barbarie cuando en el municipio no hubo resistencia alguna a las tropas ocupantes ni se realizaron actos de represalias personales o contra su patrimonio a los vecinos que vieron con simpatía y adhesión la rebelión fascista. El único acto reprobable en el que participaron algunas de las víctimas fue la ocupación y desalojo de mobiliario y enseres de la capilla del Rosario para constituir un centro obrero. Los muertos no fueron víctimas de la guerra civil ni cayeron en la contienda militar, puesto que no hubo conflicto bélico en San Juan de Aznalfarache, fueron civiles inocentes y desarmados cuyo único “delito” fue el de intentar sacar a España de la Edad Media y comenzar a parecernos un poquito a lo mejor que ha dado Europa (como todavía ocurre en nuestros días), pensar de manera distinta a la ideología totalitaria que los dirigentes de la sublevación militar acabaron imponiendo en todo el pais o, simplemente, ser familiar de los anteriores. 


Como en nuestros días, el lema de est@s demoni@s de misa diaria sigue siendo: "Todo para l@s nuestr@s y para l@s otr@s ni agua del grifo". Siguen pensando que ellos deben limitar siempre nuestras ansias de justicia social y libertad real, puesto que: "mientras más les demos más pedirán".




María Arriaza Calero, asesinada cuando sólo contaba con 21 años, recordada por los retratos que su familia ha conservado como un tesoro los 81 años que han transcurrido desde que la asesinaron vilmente, ya tiene su calle en San Juan de Aznalfarache, demostrandose así que se puede matar a las personas, pero nunca a las ideas. Su nombre ocupará el lugar del sanguinario demonio cardenal Segura, para mayor honra de ella. Y aunque su cuerpo no ha podido ser recuperado de la fosa común donde la tiraron sus ejecutores, su nombre no se perderá en la desmemoria interesada de los herederos de sus verdugos, ya que muestran la misma mala baba y carencia de empatía que sus progenitores, mamaron su misma mala leche. Su recuerdo permanecerá por más que intenten enterrarla por segunda vez.


Los hermanos Arriaza Calero. Fotografía del Archivo de la Familia, facilitada por la Plataforma de Memoria Histórica de San Juan de Aznalfarache.


Dos hermanos de María también fueron fusilados en una saca posterior: Diego, de 18 años, y José, de 21. El matrimonio formado por Guadalupe Sánchez López y su marido Antonio Anillo Marín también fue asesinado. Su único hijo, que entonces tenía 10 años, se quedó solo en el mundo. Raúl Sánchez ha hablado con aquel huérfano, Manuel Anillo, y me cuenta que recuerda que sus vecinos le facilitaban comida que él llevaba a sus padres al barco Cabo Carvoeiro, que sirvió de prisión, dado que el resto de cárceles y de edificios oficiales se saturaron pronto por el ingente número de apresados. Manuel Anillo guarda la imagen nítida de su madre pidiéndole que fuera bueno. La mayoría de las nueve aceituneras, afiliadas al sindicato UGT, eran jóvenes, solteras y sin hijos, pero tres de ellas sumaban 9 criaturas a su cargo.


Ni olvidamos ni perdonamos, como vuestros curas lo hicieron:


Rosario González Rodríguez, 28 años.


Victoria Quintanilla Muñoz, 24 años.


Josefa Romero Barberán, 28 años. La bisnieta de su hermana Caridad, Esmeralda, cuenta que “fue violada y sus pechos cortados antes de sus fusilamiento. Siempre llevaba un pañuelo rojo al cuello y le llamaban la rojilla.”


Leonisa Panadero Maya, 19 años.
Las 2 hermanas Gabina Isabel y Francisca Porro Domínguez de 36 y 43 años.


María Arriaza Calero, 22 años. Gracias al trabajo de Raúl Sánchez y la Asociación memorialista de San Juan, se sabe que los franquistas de San Juan, “fascistas rabiosos del pueblo” asesinaron a 2 de sus hermanos. A José con 25 años el 26 de octubre de 1936, y a Diego con 18 años el 4 de enero de 1937.


Guadalupe Sánchez López de 34 años y su marido Antonio Anillo Marín, que dejaron huérfano y traumatizado a su hijo Manuel de 10 años. La hija de Manuel, Guadalupe Anillo cuenta que “Mi padre iba a llevarles comida cada mañana al buque cárcel, y aquella mañana le dijeron al niño que a sus padres se los habían llevado para fusilarlos al cementerio”. También cuenta que tuvieron que irse corriendo de Morón cuando algún americano de la base conoció su pasado familiar. “Lo hemos pasado realmente mal”.


Josefa Tierno García, 24 años.


Serafina Vela Vela de 36 años, mes y medio más tarde asesinarían a su único hijo José Vela Vela de 18 años.


Leonisa Gallardo Maya con 19 años, 2 semanas antes habían asesinado a su padre Francisco Gallardo Hernández; a Carmen Bermúdez Pavón con 36 años, 4 días antes asesinaron a su hermano Juan Bermúdez Pavón con 21 años.


El investigador de las fosas de Sevilla José Díaz Arriaza, declara en su libro Ni localizados, ni olvidados que sus restos mortales deben encontrarse en la fosa común del Monumento, una de las 7 fosas comunes del cementerio de San Fernando de Sevilla donde podrían albergarse hasta 4.500 personas asesinadas por los militares fascistas sublevados. “Es la segunda fosa que se abre tras colmatar la primera gran fosa en el verano del 36 conocida como Pico Reja. Aún siguen 2.000 personas sin identificar.




Fuentes:



https://documentalismomemorialistayrepublicano.wordpress.com/2017/12/31/las-9-aceituneras-de-san-juan-de-aznalfarache-asesinadas-extrajudicialmente-por-militares-franquistas-en-sevilla-en-1936/


http://blogs.interviu.es/laotraversion/2017/11/02/historia-de-las-nueve-aceituneras/


http://asocpascaznalque.blogspot.com/2015/04/sanjuaneros-victimas-de-la-represion.html


En recuerdo de estas 9 mujeres asesinadas por la barbarie fascista se coloccaron unos azulejos con sus nombres.



Pocas horas después de ser colocados los azulejos, con la mezcla aun fresca, los malnacidos a los que antes aludía destrozaron el monumento. Nada han aprendido en 40 años, siguen siendo igualmente descerebrados.


3 comentarios:

Anónimo dijo...

No se puede demostrar por la complejidad de nuestra biología, fisiología etc etc pero cada vez tengo mas claro que hay una proporción muy alta de seres humanos con características especiales que los hace permeables a la crueldad, al sadismo.. quizá un mecanismo de obsolescencia programada???.

Gracias por ser un muro , una contención de eso que hemos convenido en llamar Fascismo, pero bien podría tener....muchos más.

Erik Redflame dijo...

Puede que una tara cerebral de nacimiento. O genético. El caso es que tienen la misma mala baba que sus padres y abuelos, ya que por descontado, el ambiente familiar forja buena parte de la conducta que tendrán l@s niñ@s al hacerse mayores. Y si van a escuelas donde se les enseña el odio de clase desde tierna edad, pues el resultado es bastante previsible. Si se les negase a los curas la posibilidad de enseñar, otro gallo cantaría.

Erik Redflame dijo...

Bueno, tanto como muro. A veces la verdad es más efectiva que cualquier arma ofensiva o defensiva, ante ella, los que valoran la inteligencia por la capacidad de mejor engañar al prójimo se sienten desarmados. ¿Y qué más realidad que ver las fosas con los esqueletos amontonados, los cráneos agujereados por el tiro de gracia y las manos atadas con alambres? Ante eso nada pueden las fake news esas tan de moda ahora por parte de todos los partidos políticos sin excepción. Porque la izquierda caviar sólo habla de republicanos o comunistas, pero el mayor sindicato del mundo por entonces, la CNT no era republicana y dejó más muertos en las cunetas que cualquier otro sector de la población represaliada. Pero eso está cambiando y todo se sabrá. Como que lo del peligro bolchevique es la mayor farsa de todas. El PCE sólo obtuvo el 4% de los votos en las elecciones del 36 y el primer gobierno tras el triunfo del Frente Popular estaba compuesto exclusivamente por republicanos burgueses. Pero los medievalistas no admitían ni el liberalismo burgués.